En la actualidad, Instagram es una de las redes sociales más importantes e influyentes. Su presencia en los móviles es absoluta y son millones los usuarios que diariamente ingresan a la plataforma para consumir contenidos, descubrir tendencias y comprar productos.
Instagram es la red social visual por antonomasia, los contenidos en imagen y vídeo tienen en ella su plataforma predilecta, y cuando se está buscando apalancar el desarrollo de un negocio por internet, utilizar Instagram como parte central de sus esfuerzos de marketing, puede ser tan acertado como eficiente.
¿Cómo funciona Instagram y cómo posicionarse rápidamente?
Instagram prioriza los perfiles de usuarios y empresas en base a la autoridad y la relevancia. La autoridad viene dada por la cantidad de seguidores que pueda tener un perfil. Así, un perfil con solo un seguidor no tendrá más autoridad que uno con 1 millón de followers. Por su parte, la relevancia viene dada por la calidad de los contenidos que pueda publicar.
Para la calidad, Instagram utiliza las métricas de ‘Likes’ e interacciones -compartir, reproducciones, comentarios- y la compara con la cantidad de usuarios que pueda tener un perfil.
Lograr relevancia y autoridad es imprescindible para un negocio que apueste por Instagram como su plataforma social, aunque para ello tenga que hacer algunos esfuerzos que le ayuden a lograrlo.
Lograr autoridad y relevancia
Captar seguidores en Instagram puede llegar a ser un proceso difícil y lento para la mayoría de los usuarios, incluso para aquellos que tienen una propuesta de productos y servicios irresistible.
Para lograr mejorar esas estadísticas, hay algunos consejos que pueden ser de utilidad:
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Publicar con regularidad: los perfiles en Instagram que comparten fotos y vídeos con regularidad -sobre todo si son originales- podrán ganar un mayor número de seguidores con relativa facilidad.
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Entender la audiencia: más allá de ganar seguidores, se deben también ganar los correctos. Conocer a su propia audiencia, lo que busca y lo que le interesa, es tan importante como publicar regularmente.
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Contratar servicios: el crecimiento al inicio puede ser lento y cuando se ha alcanzado un tope, superarlo exponencialmente parecerá imposible. Es ahí donde servicios como el de comprar seguidores en Instagram pueden ser de utilidad, porque ayudan a mejorar las métricas, lo que, como se ha visto, influye positivamente en la forma que la plataforma prioriza la autoridad y la relevancia de cada perfil.
La relevancia
A pesar de ello, no sólo de seguidores vive un perfil de Instagram. De hecho, es negativo para una marca o un negocio tener millones de seguidores y muy pocas interacciones, lo que es entendido por la plataforma como un perfil que publica contenido de baja calidad, y por ello, “nadie le presta atención”.
Es por eso que, además de comprar seguidores por internet, hay plataformas en las que también puedes ver servicios para Instagram relacionados con las interacciones. Con la seguridad y discreción que el caso necesita, se pueden comprar visualizaciones, likes y comentarios, para de esa forma también aumentar el ratio de relevancia, lo que conducirá al certero resultado de la creación de tendencias, que luego potenciarán la marca para que siga creciendo y atrayendo a usuarios de forma natural.
¿Por qué un negocio debe estar en Instagram?
Ahora que es conocido el sistema de Instagram y la forma en que una marca o profesional podría destacar su propuesta en esa red social, es pertinente hablar sobre porqué un negocio debería estar en Instagram y no en otra red social, o al menos, porqué debería priorizar su presencia en esta red social visual:
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Bajo coste de implementación: utilizar los servicios de Instagram es gratis y la forma en que se generan los contenidos puede ser muy económica, además de existir otros ahorros indirectos en lo referido a la captación de potenciales clientes. Por su bajo coste de implementación y por la rentabilidad prácticamente inmediata que puede tener, utilizar Instagram para un negocio siempre será beneficioso.
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Alta efectividad: es cierto que una imagen vale más que mil palabras. Instagram tiene una efectividad muy alta para captar interacciones y acciones determinadas, como clics, comentarios o mensajes privados, en parte por apostar por el aspecto visual como uno de los que más consumidores tiene en la actualidad, con el auge de la navegación móvil. Un negocio necesita a Instagram, entonces, por su alto poder de captación, sobre todo cuando la propuesta está bien orientada.
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Vender más: aunque no sea directamente una red social diseñada para el comercio, Instagram es tal vez la mejor red social para funcionar como escaparate de productos y servicios, sobre todo cuando esos productos tienen especificaciones que se explican mejor con imágenes. Son incontables los casos de éxito de marcas que han creado verdaderas tiendas digitales gracias a Instagram, ya que su componente viral y su cualidad visual, permiten llegar a una audiencia que, también sea dicho de paso, cada vez ingresa más a Instagram con la opción de compra entre sus prioridades.
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“Saber hacer”: crear marcas humanas es una de las necesidades modernas del emprendedor, una marca con color, con identidad, con un ‘know how’ bien definido. Instagram es la mejor manera de servir como plataforma para difundir contenidos de ese tipo, lo que no sólo genera vinculación con los potenciales clientes, sino que también permite atraer talento a la empresa, en una situación de ventaja bidireccional nada desdeñable.
Instagram es una plataforma excelente para negocios de cualquier tipo. No obstante, los resultados y el crecimiento dependerán de la calidad de la estrategia de marketing y de la rapidez con la que se genere la autoridad dentro de esta red social. Siempre teniendo en consideración que serán los usuarios que lleguen naturalmente y se interesen por sus contenidos los que, más adelante, se convertirán en clientes regulares y en embajadores de la marca y sus productos.
Instagram es, también, parte de un gran compendio de redes sociales que hoy permiten estar más cerca que nunca de las necesidades de los usuarios potenciales. Crear sistemas eficientes, humanos y de calidad, que entiendan tales necesidades y las satisfagan, será fundamental para tener éxito.
