Cómo evitar el anisakis

La merluza de las subzonas cuarta y sexta, capturada en aguas con menos pesca, tiene menor presencia del parásito
Merluza en la lonja
photo_camera Merluza en la lonja

Recordar la necesidad de leer las etiquetas es un consejo que se hace pesado de tanto que se repite, pero no deja de ser cierto. Esa costumbre tiene que extenderse a toda la compra, incluida la de pescado, que es quizás cuando se tiende a ignorar.

Muchos consumidores confían en su ojo clínico para decidirse en la pescadería. Sin embargo, echar un vistazo a la etiqueta del precio nos permite adivinar algunas cosas del interior del pescado. En concreto, de la merluza. Es obligatorio que, además de la zona, el cartelito incluya también la subzona y ahí está la clave: es preferible elegir merluza de la subzonas cuarta y sexta porque está capturada más al norte, en aguas más frías y con menos pesca, de forma que tiende a tener menos anisakis. Una forma de que se propague es el destripamiento de los animales y el depósito de esos restos en el mar, ya que otros peces consumen entonces el parásito.

Lo cierto es que la presencia del parásito es inocua una vez que el pescado se cocina. En el caso del que se consume crudo, como el sushi, en España es obligatorio congelarlo precisamente para eludir los efectos del consumo de anisakis. Además, cuando se compra merluza, los pescaderos tienden a limpiar las piezas eliminando toda la zona donde se concentra, que se puede sacar limpiamente sin que afecte al resto de la carne.

Esto implica que, si se compra por ejemplo el de la zona octava, no quiere decir que se lleve a casa merluza con anisakis, pero se elude aún mejor si se circunscribe la compra a determinadas zonas.

Cada vez más, y aunque las piezas sean buenas y grandes, la diferencia de precio se nota entre las capturas de una subzona y de otra, pudiendo llegar a ser de entre tres y cuatro euros el kilo.

Los interesados en comprar merluza de las subzonas cuarta y sexta harán bien en acudir a la Plaza el martes. Es más probable que den con ella ese día que en el mercado del viernes.