Acusan al matadero Suavi de Lugo de incumplir la regularización de "falsos autónomos"

La CIG ha denunciado lo que califica como "abuso de los derechos del personal" ante la Inspección de Trabajo Central

Foto de archivo del matadero Suavi. AEP
photo_camera Foto de archivo del matadero Suavi. AEP

La Confederación Sindical Galega (CIG) ha acusado este miércoles al matadero de aves Suavi de Lugo de "incumplir" el proceso de regularización de "falsos autónomos" iniciado por la Inspección Central de Trabajo en toda la provincia. 

En un comunicado, el sindicato ha asegurado que esta identificación como "falsos autónomos" afecta en Lugo a más de 600 trabajadores y a dos empresas que "están negando en la práctica asumir" al personal de sus compañías principales: el matadero de ganado industrial Sada, en Castro de Riberas de Lea, y el de aves Suavi, en Fazai. 

Por lo que respecta a este último, la CIG ha calificado el caso del matadero Suavi como el "más escandaloso", ya que "acaba de tramitar una nueva baja de la totalidad de su personal falso autónomo en la Seguridad Social", contrariamente a la imposición de alta de oficio dictada por la Inspección Central de Trabajo. 

Así, ha afirmado que en la actualidad, con motivo de la suspensión de la actividad de la "falsa cooperativa" este martes 7 de agosto, derivada del acta de liquidación de cotizaciones a la Seguridad Social, Suavi "sigue sin asumir al personal de la empresa principal". 

Por ello, la organización sindical ha denunciado lo que califica como "abuso de los derechos del personal" ante la Inspección de Trabajo Central de Lugo, y ha pedido que estos profesionales "vuelvan a ser dados de alta inmediatamente en la empresa Suavi". 

De este modo, sostiene que el matadero de aves "acumula una serie de incumplimientos derivados del empleo de falsos autónomos", y que "recientemente acaba de cesar la prestación de servicios también a través de otra cooperativa, Auga S. Cooperativa", para "evitar seguir el rastro de su incumplimiento en materia de derechos laborales". 

Finalmente, la CIG ha asegurado que seguirá "denunciando este tipo de situaciones" para que tengan "las sanciones correspondientes", porque "no es de recibo que este personal reciba amenazas de la empresa", ni que "no se asuman las resoluciones de la propia Inspección de Trabajo". 
 

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