La Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) impulsó la retirada de los restos de madera acumulados contra los pilares del puente de Uriz, localizado en el cauce del río Ladra, entre Begonte y Outeiro de Rei.
Operarios de la empresa Tragsa, en concreto una brigada de cuatro operarios especializados con el apoyo de un camión-grúa, ejecutaron la actuación, enmarcada en las labores que esta firma lleva a cabo hasta final de año como responsable del Servicio de Conservación y Restauración de cauces de la Demarcación Miño-Sil. Esta consistió en la retirada de troncos, entre ellos "un árbol de gran porte y una cepa", además de diversa vegetación acumulada.
Desde la confederación recuerdan que el puente de Uriz, dadas sus características -es una estructura bicentenaria, de fábrica de piedra-, acumula con facilidad restos de árboles en el cauce, lo que "supone una merma importante de la capacidad hidráulica del mismo que, por la fuerza del agua, podría deteriorar la propia infraestructura".
Vecinos de Begonte y de Outeiro de Rei, que en días pasados cuestionaron la limitación de tonelaje del puente, aprovecharon también para reclamar la retirada de los troncos, al estimar que podían dañar la estrutura. La Diputación, titular de la vía, confirmó entonces que ya se había realizado una limpieza el pasado año y que se solicitaría otra si era necesaria.
