El ribadense Chinco, el delantero más eficaz de Primera Autonómica en los últimos años, volvió a aparecer cuando su equipo más lo necesitaba. El jugador anotó los dos goles en la jornada para darle el triunfo en el derbi disputado en O Árbol, ante el Valadouro, y permite a los suyos colocarse en zona de ascenso después de muchas jornadas. El Ribadeo empata a puntos con el Burela en la reñida lucha por la segunda plaza que están librando estos equipos con el Lourenzá, Pastoricense y Milagrosa.
El delantero considera muy positivo el resultado, ya que cree que sacar adelante los derbis «sempre resulta complicado, da igual a clasificación». Según Chinco, el resultado fue justo y reveló la superioridad de los suyos, sobre todo en la segunda mitad. «Creo que fomos mellores en tódalas facetas do xogo. A primeira metade foi nivelada porque o Valadouro aguantou físicamente, pero na segunda pasámoslle por enriba», señaló.
El jugador recibió «unha dobre alegría», por los tres puntos y por sus dos goles. «Non estaba sendo o Chinco do ano pasado, xa que a estas alturas levaba 20 goles e agora tiña 12. Con estes dous chego a 14 e espero anotar máis antes de que acabe a Liga», dijo.
La segunda plaza recién conquistada sirve como un plus de moral a los de Vilachá para afrontar los nueve partidos que restan. Chinco está convencido de las posibilidades del equipo de retenerla, aunque pide mayor regularidad para el tramo final de la Liga. «O noso problema foi que tivemos moitos altibaixos, pero o equipo está capacitado para ascender. Tamén ó principio de tempada pensaba que estaríamos ó nivel do Chantada, pero faltounos regularidade, alternando bos partidos con outros moi malos. Agora estamos adestrando moi ben, con forza e con gañas de loitar polo noso obxectivo ata o final».
Los ribadenses regresarán ahora al Pepe Barrera para afrontar uno de los partidos más difíciles que les quedan en casa, ante el Pastoricense. Chinco admite que será una buena prueba para demostrar que quieren estar arriba hast el final. «No encontro da primeira volta empatamos sin goles e xa vimos que era un rival moi forte. Físicamente é un dos conxuntos máis poderosos da categoría e seguro que virá coa intención de poñernos as cousas difíciles».
Antonio Casal
La otra cara de la moneda fue el Valadouro, que sufrió un paso atrás en la lucha por la permanencia al perder con el Ribadeo. El técnico, Antonio Casal, considera que perder a estas alturas de temporada «siempre es negativo porque dejamos de sumar y estamos muy necesitados», señaló el técnico, que reconoce que su equipo no encontró el juego habitual. «El Ribadeo practicó un fútbol muy directo y nos costó contrarestarlo. Cometimos dos fallos individuales atrás y esa fue la diferencia», afirmó.
Pese a todo, Casal tiene máxima confianza en los suyos. «La igualdad sigue siendo tremenda y se puede decir que por vez primera en la temporada dependemos de nosotros mismos. Desde que llegué al equipo sólo tengo palabras de elogio para la actitud y el compromiso de los jugadores y estoy seguro de que seguirán igual hasta el final», concluyó.
LUCHA POR ASCENDER |
La jornada resultó fructífera para el Ribadeo, no sólo por su triunfo, sino porque no ganaron ninguno de sus rivales directos, salvo el Pastoricense. El Burela y el Milagrosa empataron, mientras que el Lourenzá cayó. El equipo de A Marosa empató en su feudo ante el Folgueiro en un partido con poca historia, que acabó sin goles, y el Lourenzá cedíó por 3-1 en el campo del líder, Chantada. Zona cómoda
Permanencia
27puntos
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