El convenio entre el Concello de Ribadeo y la empresa Paisajes de Asturias mediante el cual la parte municipal de la Torre de los Moreno, un 21% del inmueble, pasará a ser propiedad de dicha firma a cambio de la rehabilitación de un edificio para acoger el juzgado de paz, está listo, pero ello no implicará que se pueda iniciar una rehabilitación integral del emblemático edificio ribadense.
Lo que sí podrá hacer la empresa, que pasa a ser la propietaria de un 81% de la Torre de los Moreno, es realizar algunas obras de urgencia que garanticen la seguridad. Se trataría de actuaciones sobre todo en las tres fachadas que dan al Cantón, la calle Villandrando y la Praza de Abaixo para evitar que se produzca la caída de cualquier tipo de material que pueda ocasionar daños a alguna persona.
La parte trasera ya dispone de una pequeña zona ajardinada que complica que caigan cosas directamente a la calle, aunque también puede suceder. Sin embargo las otras dos fachadas sí que suponen un peligro evidente y, de hecho, en este momento se encuentran valladas por seguridad para que nadie pase justo bajo ellas.
Los tres últimos alcaldes de Ribadeo ya se encontraron con problemas para avanzar en la adquisición de la propiedad del edificio
HEREDEROS
Paisajes de Asturias será quien tenga que lidiar ahora con el farragoso trámite de conseguir la parte de la Torre de los Moreno que está todavía en manos de sus herederos. Desde el gobierno municipal con Fernando Suárez a la cabeza trabajaron en ello durante varios años pero acabaron poco menos que desistiendo del empeño.
Por el camino se encontraron con todo tipo de problemáticas con las que ya habían lidiado anteriormente José Carlos Rodríguez Andina y Balbino Pérez Vacas. Desde la localización de los legítimos propietarios hasta buscar un precio adecuado por el porcentaje que cada cual tiene del edificio y su posterior adquisición. Pero todo quedó en una maraña administrativa que acabó por no dar ningún fruto y a veces desquiciar a los negociadores con los herederos.
DESTINO
Ante el evidente estancamiento de esas negociaciones Suárez Barcia optó por desvincular al Concello del proyecto de forma radical y dejar el futuro de la Torre de los Moreno en manos privadas ya de una forma definitiva y completa.
Esto le acarreó algunas críticas porque se pierde una parte pública de propiedad en el edificio más representativo de la localidad. Él se defendió aludiendo a que materializar esa propiedad es complicado porque no hay una división horizontal del inmueble por un lado y, por otro, aseguraba que no estaban claras las condiciones en las que el Concello podría negociar en el futuro.
A ello añadía otra circunstancia, que existían advertencias por parte del equipo técnico municipal de que la responsabilidad en caso de cualquier incidente iba a ser directamente de la alcaldía, ocupada por él ahora o por quien sea que le suceda en el futuro.
