La catedral de Lugo prepara un plan de autoprotección general

La basílica sufrió, al menos, dos incendios a lo largo de su historia, en los siglos XVI y XVIII, en los que ardieron parte del archivo, la sacristía y la custodia

La catedral de Lugo. AEP
photo_camera La catedral de Lugo. AEP

La catedral de Lugo está preparando un plan de autoprotección con una empresa, que aborda varias cuestiones con el fin de garantizar la seguridad de la basílica, según afirmó el delegado diocesano de Patrimonio Artístico. A mayores, el templo cuenta con un protocolo de prevención de incendios, que recoge iniciativas como el corte general eléctrico o vigilar que queden todas las velas apagadas cuando la catedral cierra de noche.

"Aquí hai moita madeira pese a que as cubertas están suxeitas por unha placa de formigón e non de madeira como en Notre Dame. Pero, aínda así, hai moito material combustible na catedral", manifiesta Carnero.

El delegado de Patrimonio Artístico cree necesaria la renovación de la instalación eléctrica. Sin embargo, afirma que es un trabajo "costoso".

INCENDIOS. Aunque se tomen medidas, la catedral —como cualquier edificio— no está libre de ser pasto de las llamas. De hecho, ya lo fue al menos en dos ocasiones. La primera, en el siglo XVI, cuando ardió parte del archivo. La segunda, según recuerda César Carnero, en el XVIII, a raíz de la renovación de la capilla mayor.

"Aquel lume afectou á sancristía. Caeu unha das velas que había encendida e prendeu lume. Foi tremendo, calcinou a sancristía e a custodia", cuenta el delegado de Patrimonio Artístico.

Este tipo de incendios en edificios antiguos era, entonces, relativamente frecuente porque, según apunta César Carnero — también canónigo de fábrica de la catedral—, "a iluminación era con velas e lámpadas de aceite, o que sempre supoñía un risco, especialmente habendo tanta madeira como había e aínda hai neste tipo de monumentos históricos tan antigos".

CULTURA. El Ministerio de Cultura convocó un Consejo de Patrimonio Histórico en Madrid para el día 26 con el fin de abordar la situación de los planes de salvaguarda de bienes culturales ante emergencias. Estos planes se enmarcan dentro del Plan Nacional de Emergencias y Gestión de Riesgos en el Patrimonio Cultural, aprobado en 2014 y coordinado por el Instituto de Patrimonio Cultural.

En la última reunión, celebrada en Ourense, se iba a actualizar la información sobre los planes de salvaguarda pero el asunto no se trató por falta de tiempo.

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