El popular Ramón Carballo ganó las elecciones en Lugo con casi un 32% de los votos y diez concejales, uno más de los que tenía, pero Lara Méndez podrá repetir como alcaldesa si logra pactar. El PSOE suma de nuevo ocho escaños aunque con el 26% de los apoyos se queda lejos del PP. Todo ello ya con el 100% escrutado.
El BNG, que tenía dos concejales, se dispara hasta cinco con el 16% de los votos, mientras que Ciudadanos mantiene los dos que había logrado en 2015. De la corporación desaparecen tanto Ace como Lugonovo, y tampoco entra Podemos en solitario. Todos ellos se quedan entorno al 3% de los votos.
REACCIONES. En esta noche electoral, Lara Méndez ya dejó entrever su disposición a negociar con el BNG, pero siempre desde la perspectiva de que será ella, como cabeza de lista de la fuerza más votada de las dos, la futura alcaldesa de Lugo.
Por su parte, Rubén Arroxo reconoció que ambos partidos tendrán que ponerse de acuerdo para formar gobierno, pero también recordó que el BNG ha asumido "una gran responsabilidad" con todos los vecinos que le han votado, precisamente por plantear un modelo de ciudad alternativo, diferente al promovido por Lara Méndez durante los últimos cuatro años.
Por su parte, Ramón Carballo aseguró que el sabor de este noche electoral "es agridulce para el Partido Popular", porque ha vuelto a ganar las elecciones en Lugo, pero de nuevo tendrá que ver cómo se queda fuera del gobierno, porque los "perdedores" volverán a pactar.
Olga Louzao reconoció que los resultados de Ciudadanos no fueron "los esperados", porque confiaban en incrementar su representación en el Ayuntamiento de Lugo, pero se "ha producido una concentración de votos en las fuerzas tradicionales", a pesar de que "está claro que los lucenses no están contentos con la labor de Lara Méndez".
