Burela recupera su pasado castrexo

Burela rememoró su pasado aguerrido y guerrero con una nueva edición de la Festa Castrexa. Siete años de una cita, que se vive en la calle, y en la que en la jornada de ayer innovó con las comidas y cenas organizadas en la Praza da Mariña, una de las propuestas mejor acogidas de esta edición, la primera en la que la asociación Burela Castrexa se hizo cargo de la cita.

La jornada empezó cerca del mediodía en la playa, donde los diferentes clanes se dieron cita para participar en los diversos juegos preparados por la organización, con el apoyo de empresas especializadas. Una mañana en la que varios miembros de cada equipo tuvieron que sortear obstáculos en una vertiginosa carrera de relevos, hacer la montaña más grande de arena, lanzamiento de pacas o coordinación.

En el mismo arenal de Portelo se habilitó un espacio para que los niños se enfrentaran a sus propios desafíos, en este caso sin necesidad de pertenecer a un clan. Los más pequeños disfrutaron de una parte de la fiesta hasta esta edición casi vetada para ellos, pues los premios mermaban la participación de los críos. Un cambio muy bien acogido y que se sumó a la opción también de poder hacer su propia búsqueda del torques, sin salir de la Praza do Concello, mientras los mayores recorrían la localidad para hacerse con la preciada joya.

El festejo se cierra este sábado tras dos días de lo más intenso.