El BNG de Viveiro, acompañado por un grupo de vecinos, efectuó este domingo un balizamiento simbólico de los edificios en mal estado situados en la zona de Seiramar, en la parroquia vivariense de Covas. La formación, cuya responsable local es Gloria Rouco, considera "insuficientes" las medidas adoptadas por el Concello vivariense.
La nacionalista precisa que su partido no solicita la demolición ni la rehabilitación de los inmuebles deteriorados, dado que entiende los problemas económicos que puedan tener los propietarios y que el Concello precisa autorización de estos para intervenir, pero reclama la colocación de una malla de seguridad para evitar que se repita la caída de elementos a la vía pública. De hecho, una vecina manisfestó que al pasar un día por la zona le cayó un trozo de un cristal de una de las ventanas y "pasoume rozando".
El BNG de Viveiro cree que debe primar la seguridad de las personas y además apunta al impacto visual de construcciones ruinosas, dado que las de Seiramar en concreto están ubicadas frente a la primera línea de costa, "polo que a imaxe que dan aos visitantes non é boa, algo no que debería pensar a rexedora agora que acaba de voltar de Fitur", subraya Rouco. La responsable local del BNG lamenta que "sempre estemos esperando a que pase algo" y constata que "os edificios cada día están máis deteriorados".
Por su parte, el responsable de Galiza Nova, Severiano Salgueiro, agradeció a los vecinos que respaldasen su reivindicación. "Aplaudimos o voso atrevemento de poñervos aquí, algúns incluso sen casco". Ellos acudieron provistos de esa protección, chalecos reflectantes y de cinta para efectuar el precintado simbólico.
También recordaron que el pasado 29 de diciembre presentaron un requirimiento en el concello para que el gobierno local tome medidas a fin de restablecer las condiciones de salubridad, seguridad y ornato o determine su declaración de ruina. El BNG reclama una mayor celeridad en la actuación municipal, pese a reconocer los condicionantes normativos.
