El Juzgado de Instrucción 2 de Vilagarcía ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza para otros cuatro miembros de la organización criminal dedicada a la introducción de estupefacientes en las comarcas de Santiago, O Salnés y Baixo Miño, su posterior elaboración, distribución y venta.
Cinco de los arrestados en la operación policial comparecieron este miércoles en el juzgado y cuatro de ellos han sido enviados a prisión, incluido el supuesto líder de la trama, de nacionalidad albanesa, en tanto que el restante ha quedado en libertad, precisan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
Con anterioridad ya habían ingresado en prisión otros dos arrestados, una mujer que había comprado un kilo de cocaína en marzo y un hombre sorprendido con un kilo de heroína en Asturias en septiembre.
La causa judicial, declarada secreta, se sigue por un presunto delito de tráfico de drogas, precisan las fuentes.
La organización, según informó este miércoles el Ministerio del Interior, estaba liderada por V.V., de 39 años, de nacionalidad albanesa con domicilio en Santiago de Compostela, que a su vez tenía a otras cinco personas que trabajaban para él directamente y que se encargaban de toda la logística.
Ésta consistía en buscar compradores de droga, distribuirla, dotar de apoyo logístico o incluso aportar seguridad para esas actividades ilícitas.
Estas personas a su vez tenían a otras a su cargo, que le compraban la droga directamente o que incluso hacían de lanzadera, llegando a realizar viajes al extranjero para traer las sustancias estupefacientes.
La investigación policial se vio dificultada por las medidas de seguridad adoptadas por la organización, que contaba con individuos con amplia experiencia criminal en el tráfico de estupefacientes.
La Guardia Civil pudo comprobar en sus pesquisas que los detenidos llevaban una vida aparentemente normal y muy integrados en la sociedad.
Uno de los presuntos cerebros de la trama, identificado con las iniciales M.F.V., que estaba a las órdenes directas del supuesto líder de la banda, es residente en la comarca arousana y tiene, según fuentes policiales, antecedentes relacionados con el tráfico de estupefacientes.
El líder de la operación dedicaba íntegramente su vida al negocio de la droga, ya que los investigadores no observaron ningún otro tipo de actividad durante la operación, y poseía varias identidades para acreditar su filiación ante los organismos públicos.
En la operación se practicaron cinco registros domiciliarios y fueron intervenidos 4 kilos de cocaína, 1,7 kilos de heroína, 500 gramos de sustancia de corte y diverso material para la elaboración y distribución de las sustancias.
Asimismo, fueron intervenidos dos vehículos de alta gama.
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