Aprovecha el cáncer mortal de su hijo para quedarse con el dinero de sus nietas

El juzgado de lo Penal número 2 tenía previsto celebrar ayer un juicio por alzamiento de bienes, que finalmente fue suspendido ante el fallecimiento de uno de los supuestos responsables. El proceso deriva de un caso ya juzgado, que se instruyó en Vilalba, y en el que un hombre había sido condenado a devolver a sus nietas el dinero del que se había apropiado aprovechando que su hijo, y padre de las niñas, padecía un cáncer terminal.

Los hechos primigenios sucedieron en 2003, cuando, según la sentencia de primera instancia confirmada después por la Audiencia, J.L.R. aprovechó que su hijo se encontraba a punto de morir a consecuencia de un cáncer para sacar de las cuentas comunes que compartía con él 41.020 euros. La Justicia condenó al hombre a devolver a sus dos nietas, herederas legítimas de su padre, esa cantidad y otros 12.000 euros en concepto de intereses y gastos de ejecución.

Sin embargo, según el relato de la Fiscalía en su escrito de acusación, para evitar la devolución del dinero, el hombre cedió a su entonces pareja todos sus bienes, incluidos inmuebles, iniciando además una serie de movimientos bancarios por los que todo el dinero fue a parar a veinte cuentas de la mujer, ahora también acusada como colaboradora en un delito de alzamiento de bienes.

A la vez, el acusado tuvo la prudencia de firmar con su pareja un contrato vitalicio según el cual le cedía en propiedad la totalidad de su bienes, a la vez que se reservaba el uso y disfrute de dichos bienes a cambio de los cuidados y atención de la mujer.

Estos movimientos hicieron imposible que el juzgado de Vilalba pudiera ejecutar la sentencia previa que obligaba a devolver el dinero a sus nietas, ya que el acusado dejó de tener cualquier propiedad que se pudiera ejecutar.

Por estos hechos, la Fiscalía acusó a J.L.R. de un delito de alzamiento de bienes, y consideró a la mujer cooperadora necesaria. Para esta solicitaba una pena de 30 meses de prisión, además de una multa de 18 meses con una cuota diaria de seis euros (3.240 euros), con una responsabilidad personal subsidiaria de un día de prisión por cada cuota insatisfecha de la multa.

Además, los acusados no solo debían devolver a las nietas del hombre los 53.020 euros de la sentencia inicial, sino que estos se verían incrementados con los intereses correspondientes y todos los gastos derivados de la ejecución de la sentencia.

El juicio que debería haberse celebrado ayer se suspendió finalmente ante la muerte del principal acusado, y quedó pendiente de una nueva fecha en la que sentará en el banquillo de los acusados a la mujer.

Comentarios