Después de que el Sergas recordara en noviembre la conveniencia de que los jóvenes de entre 15 a 24 años comprobaran que habían recibido la segunda dosis de la vacuna triple vírica —que protege contra sarampión, paperas y rubeola— por el aumento de casos de paperas en esa franja de edad, se confirma un nuevo incremento y la aparición de nuevos casos, también entre lucenses.
Una joven universitaria de Lugo acaba de ser diagnosticada en Valencia, ciudad en la que estudia, después de contagiarse durante las vacaciones navideñas. Había recibido dos dosis de vacuna a los 15 meses y tres años de edad, tal y como fijaba el calendario vacunal entonces. Su caso se ha incorporado a un estudio de vigilancia epidemiológica del Hospital General Universitario de Valencia y, como vive en una residencia universitaria, debe seguir determinadas medidas preventivas para evitar contagiar a sus compañeros.
El jefe de Medicina Preventiva del Hula, Carlos Quintas, explicó que el contagio de la enfermedad es posible pese a haberse completado la vacunación porque la eficacia disminuye con el tiempo.
Una joven universitaria de Lugo acaba de ser diagnosticada en Valencia
También indicó que en otros casos puede atribuirse al hecho de que durante varios años se administró una triple vírica que incluía una cepa de la vacuna que no coincidía con la circulante. Ocurrió así entre 1993 y 1996, es decir a las personas que tienen ahora entre 25 y 29 años, que son precisamente el segundo grupo de edad en el que más han crecido los casos. Así lo refleja el boletín sobre la parotiditis (nombre real de la enfermedad) publicado por el Sergas el pasado día 13, que se refiere a las última cuatro semanas del pasado año.
Así, en el conjunto de Galicia se produjeron 259 casos en total en diciembre de 2019, de los que 54 tuvieron lugar en el grupo de entre 15 y 19 años de edad; 44 entre los de 20 a 24 y 36, de 25 a 29. Es decir, en el primer caso la tasa de afectados por cada cien mil habitantes fue de 49,8; 40,7 en el segundo y, finalmente, 28,9, en los de 25 a 29.
En Galicia se empezó a administrar la vacuna de la parotiditis en 1982, inicialmente como dosis única. Después se añadió una segunda que, al principio, se daba a los 11 años y que acabó adelantándose a los 3 años.
