Alu Ibérica ve "imposible" producir aluminio por el coste de la luz

La empresa de las antiguas fábricas de Alcoa en A Coruña y Avilés afirma que tendría todo listo para rearrancar las electrolisis en nueve meses si el precio eléctrico bajase de los 35 euros
Trabajadores de San Cibrao, A Coruña y Avilés, en una marcha conjunta. JOSÉ Mª ÁLVEZ (AMA)
photo_camera Trabajadores de San Cibrao, A Coruña y Avilés, en una marcha conjunta. JOSÉ Mª ÁLVEZ (AMA)

La empresa Alu Ibérica, que engloba a las fábricas que vendió Alcoa en A Coruña y Avilés, ve "imposible" retomar la producción de aluminio primario en esas plantas si no se reduce el coste energético.

Afirma que el estatuto del consumidor electrointensivo cayó "como un jarro de agua fría" sobre el futuro de sus proyectos empresariales y que tiene todo listo para rearrancar las series de electrolisis en nueve meses si la situación se reconduce, de lo contrario quedarían en el aire 323 puestos de trabajo.

La empresa presentó este miércoles sus alegaciones al estatuto, del que dice que sitúa el precio eléctrico entre los 45 y los 49 euros el megavatio (MW) hora, cuando el de sus competidores en Francia, Alemania y Suecia está por debajo de los 35, por ejemplo en Francia a 32. "En España no podemos producir con precios 30% más altos", dicen, para recordar que la producción de aluminio precisa "un precio estable por debajo de 35 euros".

"En España no podemos producir con precios 30% más altos", dice la empresa

Alu Ibérica apunta que durante el proceso de adquisición de las fábricas de A Coruña y Avilés por parte del fondo suizo Parter, el Ministerio de Industria "confirmó sus expectativas de que con la nueva regulación se reducirían entre 12 y 15 euros los costes eléctricos existentes en aquel momento", que eran de unos 50 euros, un hecho que "supuso un argumento importante para las partes interesadas a la hora de acordar la transacción, ya que este precio eléctrico haría viable el reinicio de las series de electrolisis y aseguraría los cientos de empleos vinculados". Sin embargo, para Alu Ibérica el estatuto no garantiza ese precio y "no sería suficiente para salvaguardar los empleos de los trabajadores de las series de electrolisis de ambas plantas, 168 en A Coruña y 155 en Avilés".

La empresa dice que ella sí cumplió su compromiso y que "está preparada" a la espera de poder reiniciar en las dos plantas las líneas de producción de aluminio primario "en nueve meses" pero para ello necesita "que se cumpla la condición previa de contar con precios eléctricos estables, predecibles y competitivos", sin los cuales no sería viable reiniciar la fabricación.

Recuerda que tiene aprobado un plan de inversión de 20 millones para las fábricas de A Coruña y Avilés, partida destinada a implantar "las últimas tecnologías para ahorro de energía y emisiones de CO2, nuevas capacidades de reciclaje de aluminio y tecnología de fundición de última generación". La idea es posicionarse como fabricante de aluminio primario y secundario aprovechando el "enorme potencial circular de este material con su infinita reciclabilidad". En la actualidad Alu Ibérica fabrica aluminio secundario con una capacidad de 140.000 toneladas al año, con 328 empleados en A Coruña y 268 en Avilés, incluidos los citados de las series de electrolisis.

Maroto dice que el estatuto no es solo para una empresa

PETICIÓN. La ministra de Industria, Reyes Maroto, pidió al PP y al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que dejen de "bloquear y mentir" y que "hagan política útil" para respaldar la aprobación del estatuto del consumidor electrointensivo, además de recordar que este documento "no es para una sola empresa, ni para un solo sector ni para un solo territorio, es un estatuto para el conjunto de la industria electrointensiva".

Maroto intervino en la sesión de control al Gobierno en el Congreso en respuesta a una pregunta de la diputada del PP Tristana Moraleja. "Dígale al señor Feijóo que en Galicia se van a beneficiar 31 empresas de su aprobación y que queremos contar con su lealtad y su colaboración. Y dígale que no utilice a los trabajadores de Alcoa para hacer su campaña electoral", dijo la ministra a la diputada.

Maroto preguntó al PP si va a apoyar esta medida "urgente" para la industria "o se van a quedar de perfil, como siempre hacen", además de acusar a este partido de "siempre llegar tarde" y de no abordar durante sus épocas de gobierno una solución para este asunto "cuando ya sabían que el mecanismo de interrumpibilidad tenía los días contados por la normativa de la Comisión Europea".

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