Blog | Sursuncorda

¿Alternativa o idea-enredo?

La movilización promuseo en San Fernando es rebatida con una propuesta que crea debate
Presentación en 2010 del anteproyecto para el museo de la romanización. AEP
photo_camera Presentación en 2010 del anteproyecto para el museo de la romanización. AEP

FUI EN SU DÍA a la presentación del proyecto ganador del concurso de ideas para un museo de romanización en el cuartel de San Fernando con la convicción de que aquello iba a ir para largo, sobre todo por el momento: año 2010, crisis económica en pleno auge y un ambiente de adelanto electoral por el declive del zapaterismo.

Pese a ello, el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo daba la impresión de querer cumplir las promesas que le habían llevado a vencer al bipartito un año antes y parecía estar volcado en inaugurar el Hula, construir el nuevo auditorio y rehabilitar el viejo cuartel. Lo más urgente y lo que de verdad importaba fue en lo que se centró la Xunta en un momento en el que, como llegó a reconocer el presidente gallego, "casi ni había dinero en caja para pagar las nóminas de los funcionarios". Y así fue y el nuevo y flamante hospital abría sus puertas a principios de 2011, aunque el equipamiento con alta tecnología para tratar el cáncer o para atender los infartos aún se haría de rogar varios años más.

Luego también se pudo ver cómo avanzaba la construcción del nuevo auditorio de Magoi, hoy ya acabado, aunque siga sin ser inaugurado una década después de la firma del convenio entre Xunta y Concello para su construcción.

La que quedó aplazada sine die fue la tercera de las patas de aquella banqueta de grandes inversiones en edificios públicos de la ciudad. El proyecto de museo de la romanización fue metido literalmente en el cajón y, de en vez cuando, coincidiendo con citas electorales, los partidos lucenses, con excepción del PP, sacaban a la luz la reivindicación de que se retomase, aunque la Xunta solo llegó a colaborar con el Concello en la cofinanciación de obras de mantenimiento en el antiguo cuartel.

El caso es que desde hace unos meses, la federación vecinal, que anteriormente liderara plataformas para exigir servicios sanitarios o la modernización del tren, comenzó a explorar la posibilidad de aglutinar a colectivos de la ciudad para echar el resto por el museo de la romanización, aprovechando como en anteriores ocasiones las citas electorales en marcha. Tras tomarse su tiempo algunas las asociaciones ‘tocadas’, la plataforma comenzó a cobrar fuerza y, a diferencia de la inacción en anteriores movilizaciones, la Xunta decidió contrarrestar la campaña promuseo y presentó una novedosa propuesta para convertir el viejo cuartel en un parador de turismo con un espacio museístico. A su vez, planteó convertir el MIHL, un fallido proyecto de centro interactivo de la historia, en el museo de la romanización. El propio conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, presentó en Lugo la idea a los miembros de la plataforma, que finalmente acabaron rechazándolo, aunque lo cierto es que sirvió para abrir un debate en la sociedad lucense sobre la posibilidad de contar con un parador. Sin embargo, la nueva propuesta no acaba de cuajar del todo a pesar de que el delegado de la Xunta, José Manuel Balseiro, a quien algunos atribuyen la paternidad de la idea, se está volcando en tratar de convencer a los distintos colectivos usando seguramente esas dotes de comercial que atesora.

A riesgo de acabar cabreando al personal, como ocurrió en su momento con el retraso en la creación de una unidad de Hemodinámica en el Hula, Balseiro parece que no cejará en su empeño de conseguir que se mantenga vivo el debate entre los que defienden que se haga el museo prometido, aunque no llegue a tener el tirón de visitas deseado, y los que se suman a la idea de crear el primer hotel histórico de la ciudad. Eso sí, a sabiendas de que la Xunta ahora solo pone la mitad de los 10 millones comprometidos inicialmente para el museo y de que ese presupuesto que se calcula para el parador parece claramente exiguo para el proyecto. Aun así, hay partido.

Comentarios