Las obras para construir el nuevo puente de Paradai comenzaron por fin. La Xunta lo anunció el jueves, y así lo recogía El Progreso en su edición impresa, y este viernes los vecinos pudieron ver por fin las máquinas trabajando.
Como ya anticipaba El Progreso, los trabajos de la Xunta se van a circunscribir a los terrenos que son plenamente de su propiedad. La propiedad de los terrenos, la solicitud de los permisos y el enésimo roce entre el Ayuntamiento, gobernado por el PSOE, y la Xunta, gobernada por el PP, hicieron que esta obra se haya ido retrasando hasta este 7 de febrero. Ese continuo intercambio de culpas entre las dos administraciones llevó a los vecinos a avisar de que se movilizarían si las obras no empezaban.
Las obras en el puente fueron adjudicadas por la Xunta en agosto de 2012 por poco más de dos millones y medio de euros. Quedaron bloqueadas primero por unas demoliciones y, después, por la falta de permisos para afectar a la vía férrea.
El puente fue ideado ya en el último gobierno del PP en Lugo y formaba parte del Plan Paradai. De hecho, este plan fue aprobado en el último pleno ordinario presidido por el anterior alcalde, el popular Joaquín García Díez, en la primavera de 1999.
