El aeromodelismo alza el vuelo en Begonte

El club Los Diablos vuelve a la actividad con la desescalada 
Uno de los pilotos, preparándose para volar. EP
photo_camera Uno de los pilotos, preparándose para volar. EP

La desescalada llega por tierra, mar y aire y este fin de semana los socios del Club de Aeromodelismo Los Diablos de Begonte pudieron volver a alzar el vuelo en un despegue muy ansiado por todos.

"Entrenamos casi todos los fines de semana y lo echábamos mucho de menos", dice Horario Chella, el presidente de un club que cuenta con una treintena de socios de las provincias de A Coruña y Lugo. Volar, en teoría, no estaba prohibido por el estado de alarma en la fase 1, al contrario que en la 0, pero sí salir del municipio, por lo que los socios tuvieron que esperar para visitar las instalaciones, inauguradas en 2005 en la parroquia begontesa de Pacios.

"Estábamos todos ansiosos para ir a Begonte a la pista a volar y lo hicimos por turnos para no juntarnos muchos, repartidos unos para el sábado y otros para el domingo", dice el presidente del club, que reconoce que empezaron con "mucho miedo", pero que "el día se prestó". "Al estar tanto tiempo sin entrenar se pierde la sensibilidad al mando, al aterrizaje, da más miedo todo... pero después de tres aterrizajes ya vuelves a la normalidad", dice este piloto con acento argentino mientras habla de la desescalada del aeromodelismo y del club.

"Los socios que viven fuera de la provincia de Lugo aún no pudieron venir al club", dice. El cambio de provincia todavía no está permitido. La crisis sanitaria, además, los obligó a tomar medidas: hay que mantener las distancias de seguridad, como en cualquier otra actividad, y ahora reservan cita previa para controlar el aforo en las instalaciones. Además incorporaron el uso de mascarillas, en los casos en los que sea necesario, y de gel hidroalcohólico.

CAMPEONATOS . Por lo de ahora, toda la competición está cancelada en el mundo del aeromodelismo, tanto a nivel nacional como internacional. "En nuestro club tuvimos que cancelar un campeonato gallego que teníamos programado en abril y un Open nacional que se iba a hacer en mayo. Este año no se si se habrá algún mundial al final, pero en principio lo que nos queda es entrenar", dice Chella, refiriéndose a un hobby que ya forma parte de sus vidas.

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