¿De abastos a gastromercado?

Un tercio de los negocios que optan a puesto en la plaza y el mercado municipales están relacionados con la restauración
Una de las cafeterías que existen actualmente en la Praza de Abastos. J.VÁZQUEZ
photo_camera Una de las cafeterías que existen actualmente en la Praza de Abastos. J. VÁZQUEZ

Hubo otros intentos años atrás y habrá que ver si este sale adelante, pero la plaza de abastos y el mercado de Quiroga Ballesteros podrían estar a punto de iniciar el camino que espacios de este tipo en otras ciudades emprendieron hace ya tiempo y que pasa por acentuar su carácter gastronómico frente al tradicional de provisión de alimentos.

Fruto de los nuevos usos y tendencias, se promovió la reconversión de mercados en espacios de restauración, con distinto resultado. En algunas ciudades tuvieron desde el principio una gran aceptación y en otras las experiencias no resultaron todo lo exitosas que se esperaba. El Concello de Lugo abrió este viernes las ofertas recibidas para abrir negocios en los 26 puestos que hay vacíos o que tienen actividad pero con la concesión caducada y, de los 16 proyectos que se presentaron, en torno a media docena son iniciativas empresariales vinculadas a la hostelería y a la gastronomía.

Hay dos solicitudes para puestos de cerveza artesana, una para elaboración de comida tradicional, otro de dulces, una churrería y cafetería con reparto a domicilio y otra para venta de pollos asados. También se solicitan puestos para alimentación vegana, para taller de información ecológica, para taller de recetas de preparación de comidas tradicionales y para eventos de degustación.

Ahora mismo hay dos cafeterías en la plaza y una en el mercado, donde funcionan dos restaurantes, uno en los soportales y otro en el interior. Junto a las solicitudes de carácter gastronómico entraron otras para carnicería gourmet, pescadería y ferretería.

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Algunas de estas actividades, tanto de restauración como de otro tipo, realmente no serían nuevas, sino que ya están en funcionamiento y lo que buscan es regularizar su situación. Algunos comerciantes accedieron en su día a los puestos por un periodo de cuatro años y estos transcurrieron sin que el Concello les diera, hasta ahora, la oportunidad de renovar. Con este fin, en las bases del concurso público que se convocó se valoraba la experiencia.

Algunos de los 16 proyectos presentados solicitan varios puestos, uno a continuación del otro, como sucede con los de cervezas artesanas. Las 16 solicitudes suman 27 puestos, aunque son 26 los que se ofrecen: 13 en la plaza y 13 en el mercado. Los mejores emplazamientos son los más demandados y para algunos se recibieron varias ofertas. Los espacios se adjudicarán en función de los criterios que establecían las bases y se intentará que de los proyectos que queden sin puesto ocupe alguno de los que no recibieron ninguna propuesta, que fueron pocos, según indicó la concejala de servicios generales, Cristina López. Los puestos se entregarán en todos los casos por un periodo de 25 años. El canon a pagar al Concello es de 13,18 euros por metro cuadrado.

Además de los espacios de venta salían a concurso cuatro almacenes y cuatro cámaras frigoríficas, para los que se recibieron dos y una solicitud, respectivamente.

El mercado y la plaza fueron objeto de inversiones importantes en los últimos años que sirvieron para modernizar la imagen de ambos espacios, aunque los cambios no estuvieron exentos de críticas, sobre todo de los placeros. Pese a la mejora de las instalaciones, la actividad comercial menguó ya que hay margen de mejora en la gestión y los servicios que se ofrecen, un aspecto en el que deben involucrarse tanto el Concello como los comerciantes, entre los que hay poca unión y a menudo resistencia a los cambios., En los últimos años cerraron puestos, por jubilación y otras circunstancias.

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