Blog | Recto verso

Nunca pasa nada

EN A MARIÑA nos quedamos sin patatas. Este año las tortillas de patatas nuevas se harán con patatas inmigrantes. Traídas de algún lugar exótico, como A Terra Cha. Da algo de cosa el procedimiento. No por el procedimiento en sí, sino por su significado: cientos y cientos de personas llevando sacos y más sacos de patatas y simiente a un "camión nodriza", que dice la Xunta. Aunque el decorado de fondo sea la plaza de As Rodrigas en Riotorto suena a película de plagas. Una de esas tipo Contagio, que era muy buena, o Cuando ruge la marabunta, que es un clásico y encima salen Charlton Heston y Elleanor Parker. Pero no, es solo la procesión de Os Caladiños. Hace un mes creía firmemente que iba a tener lugar un estallido social a cuenta de la eliminación de las patatas de nuestras tierras. Pero no pasó nada de nada. La gente entregó sus sacos y se fue al supermercado a comprar lo que antes tenía a la puerta de casa.

Así es la vida. Unas veces te quedas atontado por la tele viendo algo que les sucede a unas gentes en Calahorra, en Sotillo de la Ribera o en Alcolea del Río y al día siguiente se te planta en la plaza del pueblo un camión nodriza para llevarse tus patatas.

No se me ocurre nada que no sean pensamientos negativos. No puede ser que en Ribadeo nos invaliden el agua de la traída, nos quiten las patatas, nos exterminen las abejas y nos precinten los gallineros sin que todo ello no signifique nada.

Eso de los gallineros va a tener su gracia. En principio, los vecinos de municipios en humedales que reciban aves invernantes van a tener que tomar esa medida, que ya se decretó hace unos años con lo de la gripe aviar, aunque sin mucho éxito. Había que aislar a las gallinas. Darles de beber agua embotellada. Un verdadero disparate que al parecer tendrán que repetir en Ribadeo, Trabada, Castropol y Vegadeo, como si no hubiera aves de ese tipo, por ejemplo, en la Ría de Foz. Basta pasar por el puente de A Espiñeira para verlas pulular tranquilamente por el estuario del Masma.

Hubo quien se preguntó si no tendrá nada que ver que en ninguno de los cuatro municipios del entorno de la desembocadura del Eo gobierna el Partido Popular mientras que en los dos del Masma sí hay alcalde de dicha formación a la hora de tomar una decisión como esa, aunque seguramente sea todo un desvarío y la política no tenga nada que ver. ¿Verdad?

Como tampoco la política tiene nada que ver en ese problemilla con el agua que hay en Ribadeo, donde lo recibimos por gravedad (por la ley de la gravedad, en este caso) desde el vecino concello de Barreiros, donde el alcalde no movió un músculo por solucionarlo. Por ahí anda la denuncia del Concello de Ribadeo, a ver en qué acaba. El gerente de la cooperativa anteriormente conocida como Os Irmandiños, de donde parte el problema, tampoco aportó grandes soluciones salvo tratar de convencer al Concello ribadense de que está todo solucionado. Bueno, no solucionado del todo, pero casi. Lástima que no pueda evitar que llueva y con las lluvias intensas sus palabras naufraguen estrepitosamente. Circulan por ahí vídeos que hablan por sí solos, no precisan más comentario que una disculpa y, sobre todo, una acción para que no se repita. De momento no hay noticias de lo uno ni de lo otro.

Y mientras todo eso sigue estancado, la Xunta continúa viajando con sus camiones nodriza por toda la comarca de A Mariña para evitar que tengamos patatas y que con ello desatemos una plaga de dimensiones bíblicas. Los que trabajamos en esto no podemos evitar recordar aquellos reportajes en Cervo y Xove que publicamos aquí mismo hace ya varios años y preguntarnos si tal vez no hubiesen tenido que intervenir en aquel momento.

Es una percepción con un cierto toque a déjà vu. Porque ya sucedió antes lo mismo con las velutinas, y con eso del agua también. En general a la prensa nos caen muchísimos palos y prácticamente todos son no solo merecidos sino a veces insuficientes. Algunos se deben a cuestiones internas de las empresas, otros a errores humanos que al parecer en este oficio no se pueden cometer bajo ningún concepto. Otra veces, pocas pero algunas, cumplimos una labor social y acaba pasándonos como me pasó a mí con un concejal que me censuró con severidad por sembrar la alarma con lo de las velutinas. Que a ver qué era eso de alarmar así a la gente, que no eran más que avispas normales. Desconozco sus conocimientos sobre el mundo de los himenópteros, pero ahora me dan ganas de presentarle a unos cuantos apicultores y les exponga a ellos eso del "tranqui colega, no pasa nada".

EL GUSTO: Una opinión contra la corriente más fuerte del PSOE

LA PORTAVOZ del PSOE de Ribadeo, Aurora González Ginzo, es una mujer que demostró en muchas ocasiones que no es de las que se amilanan ante nada. Primero lo hizo fuera de la política y ahora dentro de ella. No es tan fácil posicionarse claramente en favor de Susana Díaz en el proceso de primarias de su partido en una comarca en la que su opinón, en principio, solo es compartida por una minoría. Es una muestra más de carácter y de que la independencia y la libertad de opinión tienen todavía un valor intrínseco poderoso. Tal vez alguien la mire mal, pero al menos ella no se escondió.

EL DISGUSTO: Unas jornadas importantes que no deberían ser precisas

LA DELEGACIÓN de Igualdade de Ribadeo, cuya responsable es Mari Luz Álvarez Lastra, organiza junto con el CIM unas jornadas de prevención de la violencia machista que la verdad es que no deberían celebrarse, porque eso significaría que se habría solucionado el problema. Pero no solo no es así sino que eso va a más, al punto de que asistir a las charlas que hubo la semana pasada en Ribadeo fue algo desasogante, porque quedó en evidencia que las cosas van a peor y flotaba en el aire cierta sensación de que es complicado corregirlo a corto plazo. Por eso iniciativas como esta son imprescindibles.

Comentarios