Blog | El Ala Oeste

La seguridad

La delincuencia influye mucho en nuestra percepción de la calidad de vida y últimamente recibimos señales de alarma
Un coche de la Policía Nacional. ARCHIVO
photo_camera Un coche de la Policía Nacional. ARCHIVO

POCAS CUESTIONES tienen tanta repercusión en la percepción de lo que se entiende como calidad de vida en la gente que la de la seguridad. Aunque en las grandes estadísticas siempre se habla de sanidad, educación, servicios y hasta zonas verdes a la hora de definir los parámetros que marcan el confort de una sociedad, la seguridad del entorno y la familia resulta fundamental. También las empresas lo tienen en cuenta a la hora de enviar a sus trabajadores. Pero si hay algo que sienta especial atracción por un lugar seguro es sin duda el dinero, con todo lo que eso implica. La seguridad y el dinero es algo que comparten por ejemplo Viena, Zúrich, Múnich, Düsseldorf, Fránkfurt, Ginebra o Copenhague, por citar algunas de las ciudades que año tras año repiten en los diferentes ránkings sobre la calidad de vida en el mundo.

→ El incremento de los robos
Aunque aquí envidiemos todos esos lugares a nivel económico, lo cierto es que los españoles sí compartimos algo con ellos: la percepción de que la seguridad es sinónimo de calidad de vida. Por eso resulta preocupante el repunte en un 5% de los robos con fuerza en domicilios y de los hurtos que constatan las últimas estadísticas oficiales sobre delincuencia en la comunidad gallega.

Galicia sigue siendo un lugar extraordinariamente seguro; de hecho, es el cuarto territorio español con la menor tasa de criminalidad. Pero hay que reconocer que ese incremento de determinados delitos, que tiene además su reflejo en los medios, alimenta cierto alarmismo entre la población. No hay que olvidar que, aunque un crimen es siempre muy mediático, el goteo de robos y pequeños asaltos a pisos y negocios impacta mucho más en el imaginario colectivo. Un informe de Interior apuntaba a una media de 10 robos diarios en casas de Galicia.

→ La singularidad de Santiago
En el contexto de la comunidad, es lógico que las ciudades sean las que soportan mayor tasa de delincuencia de este tipo —pese a que también aumentan los robos en el rural, incluso los de carácter agropecuario— por mera estadística de población. Pero dentro del mapa gallego llama la atención Santiago. La capital, tradicionalmente blindada a nivel policial por la presencia de los organismos oficiales, empieza a sufrir también la oleada de robos y, consecuentemente, el temor social.

Buena parte de esta singularidad hay que buscarla en el Camino de Santiago. Por un lado, porque el boom turístico garantiza clientes para el delincuente; y por el otro, por lo fácil que resulta pasar desapercibido entre peregrinos y visitantes. Santiago es ese escenario perfecto donde camuflar la delincuencia. Se empieza a notar y es especialmente relevante tenerlo en cuenta de cara al Xacobeo 2021, ya que de poco sirve preparar una cita histórica sin una seguridad a la altura del evento y, sobre todo, de la multitud que se espera.

→ No hay suficientes medios
Llevamos meses, o mejor dicho años, escuchando quejas de los diferentes cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado sobre la escasez de sus plantillas. Cada vez son más frecuentes las noticias sobre concellos que se quedan sin patrullas nocturnas de la Guardia Civil o la Policía Local, mientras que la Policía Nacional también tiene déficit de agentes y la Autonómica continúa sin completar. Cada vez menos gente para cubrir el mismo territorio, un desequilibrio que está generando problemas.

Cuando se habla de los efectos de la crisis siempre se apunta a la sanidad, los servicios sociales o los salarios, pero nunca a las fuerzas de seguridad. Igual que a los médicos, es hora de que a ellos, sean del cuerpo que sean, les llegue la recuperación.

→ La importancia del comercio
Por último, hay que apuntar a otro factor que también está alimentando esa inseguridad: el cierre de comercios. Ya lo dejaba entrever a su modo la urbanista Jane Jacobs en Muerte y vida de las grandes ciudades. El fin de muchos comercios locales deja calles enteras vacías, sin la luz de sus escaparates y la vida de sus empleados. Todos conocemos ejemplos. No hace tanto que pasear por esos lugares era calidad de vida. Hoy, en algunos hay que correr.
 

La lucense Olalla Rodil, la portavoz número 16 que se enfrenta a Feijóo
AUNQUE TAN SOLO sea de forma temporal, mientras Ana Pontón no se reincorpora tras su reciente maternidad, lo cierto es que la lucense Olalla Rodil se convirtió la semana pasada y esta en la portavoz número 16 a la que se enfrenta Alberto Núñez Feijóo en los cara a cara del Parlamento. Desde las épocas de Pachi Vázquez y Aymerich en el año 2009 hasta el reciente ingreso de Gonzalo Caballero en O Hórreo han desfilado por delante del presidente gallego nombres de peso en la política gallega como Beiras, Méndez Romeu, Leiceaga, Jorquera, Villares o la actual ministra Yolanda Díaz, y algunos menos conocidos, como Carmen Iglesias o Consuelo ‘Chelo’ Martínez, entre otros.


El lógico movimiento de Arrimadas...

LA NEGATIVA firme del Partido Popular de Galicia a la propuesta de la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, de unirse para concurrir a las autonómicas se basa en el convencimiento de que,al final, el partido naranja tendrá que ceder, porque en el escenario actual solo le quedan dos opciones: meterse bajo el ala de los populares gallegos o no presentarse. Y es que aunque Cs es ahora mismo un polvorín a punto de estallar y eso lo convierte en una pieza imprevisible del tablero político, los naranjas no fueron capaces de obtener representación en Galicia en el mejor momento de la formación y de su entonces líder Albert Rivera. La última vez que Cs fue a las urnas en Galicia se quedó con un 4,32% y unos 63.000 votos, así que las expectativas tampoco son buenas. Arrimadas sabe que embarcarse en el coste económico de una campaña en la que tiene muchos boletos para estrellarse es malo; pero peor todavía para ella sería que sus credenciales en la carrera por liderar el partido sean sendos batacazos en Galicia y Euskadi.

...y el de los Anticapitalistas de Galicia

ESTÁ INTERESANTE el movimiento que se produce a la izquierda del PSdeG, en el llamado espacio rupturista gallego. Más allá de las maniobras de Xulio Ferreiro o Martiño Noriega para no quedarse fuera de la foto por lo que pueda pasar, merece especial atención la salida de los Anticapitalistas de su matriz, Podemos Galicia. Aunque la representación y peso de esta corriente interna sea mínima, con la diputada del Grupo Común da Esquerda Paula Quinteiro como principal referente, lo cierto es que se trata de un movimiento sensato para quien conoce el funcionamiento de las mareas y su órbita. En pleno proceso para tejer alianzas y diseñar listas electorales, Anticapitalistas marca distancias y pondrá precio a su integración en el proyecto común: un puesto de salida para Quinteiro por la provincia de Pontevedra. Si no lo aceptan, los Anticapitalistas, por muy pocos que sean, no trabajarán para el espacio común y su marca quedará fuera, lo que debilita la imagen de un proyecto unificado. Es de manual,