El otro día le escuché al humorista Berto Romero algo que describe muy bien el mundo en el que vivimos. Contó que ahora los tráilers de las películas tienen su tráiler propio. La gente veía antes un resumen de dos minutos para decidir si después perdía un par de horas delante de la pantalla; hoy en día dos minutos es una eternidad en la que caben demasiados tuits, tik toks y zascas como para pasarla atendiendo a una recopilación de escenas. Por eso ahora los tráilers, sobre todo los destinados a los más jóvenes, comienzan con cuatro segundos de flashazos, de explosiones visuales que intentan atrapar al cliente para los siguientes dos minutos... la película es ya otro cantar. El miércoles vi el avance de la entrevista que Bertín Osborne realizó a Isabel Díaz Ayuso y que Telecinco emitió completa ayer. Lo pillé por la mitad y me llamó la atención que la presidenta madrileña habló en varias ocasiones de lo mucho que le gusta tomar cañas por los bares. Me acordé de lo que contó Berto y al momento localicé en esa mención a las cervezas capitalinas el pretráiler... y funcionó, porque vi el avance de la entrevista hasta el final. La película no; no pude, cuando la emitieron estaba escribiendo esto.
