Blog | El 8 del Pazo

Días de derbi en el Miño

LLEGA una nueva final y esta vez no solo para nosotros, el rival también se juega mucho. Breogán y Ourense estamos en lo más alto peleando por un sueño. Leo, y me cuentan, la historia que escriben Breo y COB en el baloncesto gallego y siento que tengo la suerte de formar parte de algo muy grande.

Salgo rumbo al entrenamiento y un vecino me dice: «Álex, ¿ganaremos el viernes?». Yo le digo: «vamos a intentarlo, claro».

Será el segundo derbi que jugamos fuera de casa y, como en A Coruña, contamos con una inmensa Marea Celeste y esperamos sentirnos una vez más como en el Pazo. En aquella ocasión el rival también nos había ganado en nuestra pista en la primera vuelta. Me imagino un paralelismo que me hace sonreír.

Me entero de que también las peñas de ambos equipos organizan su pachanga previa, el derbi de las aficiones. Me gustaría jugarlo, o poder estar en la grada para animarles, como ellos hacen cada fin de semana. Son muy grandes.

Pasea todo el equipo por el centro de Lugo, tras una dura mañana de entrenamiento, y varias personas nos dicen: «Chavales, el viernes toca ganar». Pienso: claro que toca. Entro en las oficinas del club y me encuentro con gente comprando entradas para el derbi. «Llorca, el viernes ganamos, ¿no?». «Por supuesto», digo.

Entro en Twitter y veo cientos de mensajes hablando del derbi. Con dos aficiones volcadas y contando los minutos para que llegue el viernes. Poco a poco la motivación, que nunca falla, crece.

Cumplimos con la tradición, muy lucense, de tomar unos vinos, con moderación, claro, por la ciudad. Entramos en el Verruga, en La Taberna de Daniel…, disfrutamos de los pinchos y de la buena conversación. Allí también nos dicen: «El viernes, a ganar».

Noto que Lugo está con nosotros, que quieren jugar también este derbi. Y yo, haciendo memoria de lo que he respondido o pensado cada vez que alguien me ha hablado del viernes, me doy cuenta de que cada respuesta, cada pensamiento, lleva más convicción y ganas que el anterior.

Son días de derbi, días de marea celeste en el Miño.

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