La piscina cubierta de Monterroso cumplirá su cuarto año sin funcionar

La Diputación solucionó todas las deficiencias de la obra, pero el Concello pide más reformas

El proceso para poner en marcha el complejo polideportivo de Monterroso, que incluye una piscina climatizada, va camino de convertirse en una historia tan interminable como vergonzosa. Las instalaciones, que llevan rematadas desde el año 2014, continuarán una temporada más, y ya van cuatro, sin abrir. El gobierno local se niega a recibir la obra mientras que la Diputación no asuma el coste de nuevas reformas. Concretamente, pide la construcción de un nuevo vestuario debajo de las gradas, con el fin de que los usuarios del polideportivo y de la piscina no tengan que utilizar el mismo, y la apertura de unos ventanales que permitan la entrada de luz natural a la zona de la cancha de juego.

Desde la Diputación explican que esas mejoras no estaban incluidas en el proyecto de la obra y, aunque en principio no se niegan a asumir estos trabajos -que supondrían una inversión adicional de unos 137.000 euros-, afirman que a día de hoy las instalaciones están totalmente listas y acondicionadas para que el Concello pueda abrirlas al público.

Además, desde el área de deportes de la entidad provincial, que dirige Pablo Rivera, afirman que el Concello monterrosino no realizó ningún tipo de petición oficial para demandar estas reformas y que el gobierno local solo se limitó "a facer un comentario ao deputado Pablo Rivera cando en 2017 visitou a instalación".

Aquella visita estuvo vinculada, de hecho, a la supervisión de otra serie de trabajos llevados a cabo por la Diputación de cara a subsanar algunas deficiencias detectadas en el remate de la obra, tales como algunas filtraciones en el vaso de la piscina, lo que provocaba pérdidas de agua.

Solucionado ese problema, el gobierno local reconoció que la piscina estaba "lista para abrir". Aún así, decidió volver a retrasar su entrada en funcionamiento, argumentando que, a esas alturas de año, un importante número de potenciales usuarios ya habían formalizado su inscripción en piscinas de localidades próximas, lo que le restaría afluencia.

El compromiso en ese momento pasó a que la instalación se abriría en 2018, algo que tampoco sucederá, debido a las nuevas demandas planteadas.

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