Recuperan el cuerpo de uno de los ancianos fallecidos en el incendio de su casa en Bóveda

Uno de los cadáveres fue localizado en la tarde de este lunes ►El inmueble, ubicado en la parroquia de Martín, en el lugar de A Raíña, se vino abajo pasto de las llamas con el matrimonio en su interior ► De momento se desconocen las causas del fuego

Los equipos de emergencia han localizado el cuerpo de uno de los dos ancianos que fallecieron este lunes en el concello lucense de Bóveda tras incendiarse su casa con ellos dentro. Los trabajos de desescombro, que continuaron hasta bien entrada la tarde, se retomarán este martes a primera hora con el objetivo de encontrar el segundo de los cuerpos.  

Las víctimas de este trágico suceso son José Carballeda, de 95 años, y Virginia Martínez, de 89, que se encontraban en el interior cuando se produjo el fuego. La voz de alarma la dio una vecina encargada de cuidar al matrimonio, que avisó a los medios de rescate. Lamentablemente, el techo del inmueble se vino abajo antes de que el matrimonio pudiese ser rescatado.

El suceso se producía en el lugar de A Raíña, en la parroquia de Martín. La Central de Atención a Emerxencias del 112 recibió la llamada de alerta a las 09:24 horas e, inmediatamente, movilizó a los bomberos de Monforte de Lemos y a Urxencias Médicas, con la casa prácticamente "colapsada" a causa de las llamas.

Los dos ancianos, según ha narrado el alcalde, José Manuel Arias, se encontraban en su domicilio, porque "todos los días a las diez de la mañana esperaban por los trabajadores del servicio de ayuda en el hogar". "Una vecina alertó sobre las nueve de la mañana de que había fuego en esa casa, pero a esa misma hora la casa se vino abajo. Cayó toda la cubierta", ha concretado, antes de precisar que José aún tenía "movilidad", pero que su mujer, Virginia, tenía más dificultades para moverse.

De momento se desconocen las causas del incendio, si bien el regidor ha dicho que, según le ha relatado el personal de ayuda en el hogar, la pareja contaba con "una estufa de pellets". "Sólo la encendían por el día, pero de momento no sabemos nada más", ha concluido.

Los trabajos de recuperación de los cuerpos fueron especialmente complicados, dado que la casa era una edificación de 1802 con diversos añadidos, lo que hizo más complejo el avance de la retroexcavadora.

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