Los enfermos gallegos podrán decidir sobre sus cuidados

Los gallegos tendrán derecho a dar instrucciones previas respecto a los cuidados que le quieran recibir en previsión de que no puedan ser capaces de expresar personalmente su voluntad, debido a alguna enfermedad.

Éste es uno de los principales cambios introducidos por la ponencia parlamentaria en el proyecto de ley de Lei de Servizos Sociais de Galicia, como resultado de la aprobación de una enmienda de PSOE y BNG al artículo 6.

El texto de la ponencia quedó aprobado este jueves por la Comisión de Sanidade por ocho votos a favor (PSOE y BNG) y siete en contra (PP). Otras de las modificaciones introducidas pasan por garantizar el respeto al derecho de los usuarios a ser atendidos en gallego o permitir solicitar el cambio de profesional de referencia en función de la disponibilidad del sistema.

Por otra parte, el texto que ahora tendrá que ser debatido en el pleno, introduce el fomento de la formación continuada de los trabajadores de los servicios sociales y de los cuidadores, facultando a la Xunta para crear centros y organismos especializados en esta materia que actuarán en coordinación con las universidades y con los centros académicos.

''Sin consenso''
La diputada del PPdeG Marta Rodríguez Arias criticó que el texto salga adelante ''sin debate ni consenso'', recordando que el vicepresidente Anxo Quintana sostuvo que el texto ''era susceptible de mejorarse'' durante el trámite parlamentario, lo que atribuyó a una ''estrategia de propaganda''. Así, lamentó que de las 60 enmiendas parciales presentadas por su formación ''sólo se aceptaron 5, el 8,3%''.

Tras incidir en que el texto llegó con ''retraso'' al Parlamento, dado que el bipartito se comprometió a remitírselo a la Cámara en el primer trimestre de 2007, Arias culpó a los socios de ''querer apurar'' su debate para que la norma quede aprobada antes de que se agote la legislatura.

Cheque servicio y Risga
El PP reclamó además a los nacionalistas que aclaren ''quienes van a ser los beneficiarios del cheque servicio'', así como su funcionalidad, ironizando con que ''criticaron el cheque asistencial del PP y lo único que hacen es cambiarle el nombre''.

La revisión de la Renta de Integración Social (Risga), comprometida por la Vicepresidencia para esta legislatura, fue otro foco de controversia, puesto que la oposición consideró ''una tomadura de pelo'' que se retrase hasta el año que viene.

Frente a las críticas de la oposición, la diputada nacionalista Modesta Riobó aseguró que las propuestas de la comisión ''no aportan nada nuevo''. Desde las filas socialistas, el diputado Miguel Ángel Fernández destacó que el texto es el resultado de un proceso de participación amplio, al contemplarse el 40% de las sugerencias de organismos públicos y colectivos sociales.

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