El juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de Estepona, en funciones de guardia, ha acordado la puesta en libertad del detenido por la agresión a un conocido que falleció al día siguiente en el hospital y sobre el que pesaba una denuncia por acoso sexual a una hija del arrestado.
La puesta en libertad fue solicitada por la Fiscalía, mientras el juzgado sigue a la espera del informe forense que determine la causa de la muerte. Ninguna de las partes solicitó el ingreso en prisión del detenido, según han informado este jueves a Efe fuentes judiciales.
Aunque las diligencias policiales apuntan a un posible caso de muerte por homicidio imprudente, el juzgado instructor aún no ha podido precisar la calificación judicial de los hechos a la espera de que el informe forense aclare si el fallecimiento de la persona agredida fue consecuencia de los golpes recibidos o se debió a otras circunstancias.
Mientras tanto, el juzgado de guardia, previa petición de la Fiscalía, ha acordado la puesta en libertad provisional del detenido con las medidas cautelares de obligación de presentación los días 1 y 15 de cada mes, retirada de pasaporte y prohibición de salir del país.
En su declaración ante la juez de guardia, el detenido admitió haber golpeado a la víctima el pasado 4 de noviembre por el presunto acoso al que estaba sometiendo a su hija menor de edad. Explicó que la agresión se produjo en el interior de un bar al que fue a buscar al ahora fallecido tras salir de su jornada laboral y con la vestimenta habitual de su oficio, que incluye una botas de punta reforzada, y ha negado que se hubiera calzado dichas botas con el fin de cometer la agresión.
Tras ser separados por los clientes que se encontraban en el establecimiento, las dos personas implicadas abandonaron el lugar de forma distinta. El fallecido se dirigió a un centro de salud donde le diagnosticaron contusiones, y al día siguiente fue trasladado en ambulancia al hospital, donde murió.
Según informó este miércoles la Policía, el presunto agresor, de 49 años, y la víctima, de 57, habían sido amigos hasta que en 2017 la hija del detenido, entonces menor de edad, expuso a sus padres que era acosada sexualmente por un vecino. Testigos de la pelea señalaron que mientras golpeaba a la víctima el agresor hizo alusión al acoso sufrido por su hija.
