Herido un organizador de las fiestas de Paradela al ser atacado por un perro

El suceso se produjo cuando la comisión visitaba a un vecino para pedir la cuota para las patronales de San Miguel

Un miembro de la comisión de fiestas de Paradela resultó herido al ser atacado por un perro cuando visitaba esta semana la vivienda de un vecino, al que iba a pedir la cuota para la organización de las patronales de San Miguel, las cuales se celebrarán en la localidad el próximo martes.

El suceso se produjo en la mañana del pasado martes y la víctima sufrió heridas en una pierna y el abdomen, además se le tuvo que escayolar la muñeca izquierda por ''astillar un óso'' al caer a causa del golpe del animal.

Según explicó la víctima, el ataque tuvo lugar cuando él y el otro integrante de la comisión de los festejos se encontraban con el propietario del perro junto a la casa. El can estaba atado con una cadena, la rompió y se abalanzó directamente sobre el hombre, sin atacar a las demás personas. ''O animal saíu coma un tolo, estaba ladrando e nun momento rompeu a cadea e botouse só sobre min. Foi moi simpático porque un pouco antes o meu compañeiro dixo ‘como se solte o can’ e de alí a uns segundos soltouse'', relató.

CAÍDA. El vecino se protegió con las manos del perro, que al abalanzarse sobre él hizo que cayera hacia atrás. El golpe llevó a que ''astillara'' un hueso de la muñeca, que ''non está roto de todo''. Rápidamente le quitaron el can de encima y en un primer momento pensó que no lo había herido. ''Non sei nin como é o can, do rápido que foi todo. O principio non me doía. Pensei que non me fixera nada, que nin me mordera. Non me enterei ata que dixo o meu compañero: ‘mira como tes o pantalón'', señaló la víctima.

El animal, de grandes dimensiones, afortunadamente no le causó heridas de gravedad. Lo mordió en una pierna y le provocó un corte en el abdomen. Por ello, se trasladó al centro de salud de Paradela y posteriormente al ambulatorio de Sarria y al Hospital Lucus Agusti de Lugo para realizar unas pruebas por la herida de la muñeca izquierda. El mismo día del suceso pudo regresar a su vivienda, aunque tendrá que tener la mano escayolada durante el plazo de un mes.''Non me gustan os cans nin os gatos e agora aínda menos'', bromea el vecino.

Este agradece que en el momento del ataque del can estuvieran los tres en el lugar, lo que permitió que le quitaran de encima el animal y que todo quedara en un ''gran susto''. ''Se estivera alguén só podería ser moito máis'', manifestó el hombre, quien agradeció también la preocupación del propietario del animal.

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