Los cadáveres de dos feriantes, un hombre y una mujer de etnia gitana, aparecieron en el interior de una furgoneta aparcada en la zona del Revellín de Logroño, sin que presenten signos de violencia y quienes, al parecer, pudieron fallecer mientras dormían, sin que aún se conozcan las causas.
El delegado del Gobierno en La Rioja, Alberto Bretón, en declaraciones a los periodistas, explicó que la autopsia determinará las causas del fallecimiento de un hombre de 52 años, español y vecino de León; y de una mujer de 57 años y de nacionalidad portuguesa. "Parece ser que no existen signos de violencia en los cuerpos de los fallecidos", avanzó.
Según explicó, hacia las nueve de la mañana, compañeros de ambos fallecidos, que vendían globos de helio en diferentes ferias, encontraron los cadáveres en el interior de la furgoneta, que disponía, en la parte trasera, de una zona habilitada para dormir.
Esas personas pidieron a un ciudadano que pasaba por la zona que avisara al SOS 112. Pero el personal médico solo pudo certificar el fallecimiento.
La furgoneta estaba situada en el aparcamiento del Revellín, junto a las murallas de la capital riojana, en el casco antiguo de la ciudad, que estos días celebra sus fiestas patronales en honor de San Bernabé.
Equipos de psicólogos acudieron al lugar del suceso para atender a los familiares y a los amigos de las dos personas fallecidas.