Condenado por pegar a su expareja porque ella le denunciara por suplantar su cuenta de Facebook

Un joven tendrá que realizar trabajos en beneficio de la comunidad durante dos meses por zarandear a su exnovia cuando se enteró de que la chica lo había denunciado ante la Policía por hacerse pasar supuestamente por ella en Facebook. 

Tal y como se recoge en la sentencia, la pareja puso fin a su relación sentimental en julio de 2013 y unos días más tarde, en concreto el 3 de agosto, la joven acudió a la comisaría de la Policía Nacional de Lugo y denunció que su expareja había usurpado su identidad y utilizaba su cuenta de Facebook. 

Según relató a los agentes, el joven accedía a sus datos, borraba sus mensajes y hacía publicaciones en su nombre. La denunciante explicó además que el chico había entrado en su correo electrónico, alterando y eliminando datos a su antojo, y que además se había instalado en su teléfono móvil un programa informático para poder acceder al correo y a todo su contenido desde su ordenador personal. 

Un mes después, el joven se enteró de que la chica lo había denunciado y se presentó en su domicilio para pedirle explicaciones. La pareja mantuvo una acalorada discusión y el acusado, según se recoge en la sentencia, agarró a su exnovia por los brazos y la zarandeó. La víctima acudió al médico tras el ataque y el facultativo que la atendió apreció que tenía un hematoma en el antebrazo izquierdo, así como lesiones erosivas en la muñeca derecha. 

El acusado volvió a casa de la chica sobre las cinco de la tarde del 13 de noviembre y le pidió que retirara la denuncia. La mujer aseguró que el joven la amenazó, pero el juez considera que estos hechos no quedaron probados en el juicio. 

El chico fue acusado y juzgado por los delitos de maltrato, amenazas y revelación de secretos. En el juicio contra él, el joven lo negó todo y el juez llegó a la conclusión de que no había pruebas que confirmaran que el joven utilizara la cuenta de Facebook de la chica, por lo que fue absuelto de estos hechos y de las amenazas. 

Sin embargo, el magistrado concluye que la denuncia de la chica, aunque no fuera fundada, motivó una discusión entre la pareja, que acabó en agresión. El juez se basa en la declaración "persistente" de la joven y en el parte de lesiones del hospital. 

Además de cumplir la pena de trabajos sociales, el acusado no podrá acercarse a la denunciante ni comunicarse con ella durante un año y tendrá que pagarle 140 euros por las lesiones.