La Guardia Civil ha desmantelado una organización lituana con infraestructura en España dedicada a exportar hachís oculto dobles fondos de camiones en una operación que se ha saldado con 7 detenidos y la incautación de 800 kilos de esta droga, que iba a ser trasladada a países bálticos y Rusia.
Según informa la Dirección General de la Guardia Civil en una nota, la red disponía de una nave industrial en Almería, declarada como empresa de exportación de frutas, donde preparaban la droga y la ocultaban en doble fondos de camiones trailers.
La investigación arrancó cuando agentes de la Guardia Civil localizaron a varias personas de nacionalidad lituana y asentadas en España que, sospechaban, se podrían estar dedicando a la adquisición, ocultación, preparación y exportación de importantes cantidades de droga.
Los agentes constataron que algunos de los miembros de la organización ya habían estado implicados en operaciones de narcotráfico en varios países europeos y en el Caribe, lo que les obligó a cambiar de lugar de residencia ante la presión policial para poder seguir con sus actividades criminales en España.
Durante los servicios de vigilancia a los que fueron sometidos los integrantes de la red, la Guardia Civil averiguó que la organización estaba dirigida por personas asentadas en Europa del Este, que con frecuencia se desplazaban a España, otros países de Europa, Marruecos y Sudamérica para supervisar las operaciones de narcotráfico de los miembros instalados en esos países.
Este grupo de narcotraficantes contaba también con personal afincado en Málaga, donde poseía un piso que era utilizado por los miembros de la organización que se desplazaban a España y, además, como garaje de los vehículos que alquilaban permanentemente.
Asimismo, en la provincia de Almería contaban con una nave industrial, gestionada por dos lituanos, quienes mediante cobertura legal de una empresa de importación y exportación de frutas, facilitaban un lugar seguro para el almacenamiento y ocultación de la droga, su preparación y posterior exportación.
El pasado mes de mayo los agentes pudieron comprobar que desde Letonia y Rusia varias personas de la red se desplazaron a Málaga para mantener contactos con los integrantes de la red asentados en España y, ante las sospechas de una inminente operación de tráfico de estupefacientes, la Guardia Civil incrementó los controles sobre la organización.
Así, comprobaron que algunas de esas personas adquirían en centros comerciales de Málaga y Almería utensilios de embalaje, monos de trabajo o guantes, lo que condujo a sospechar que estuvieran manipulando y preparando la droga para su traslado.
En la nave de Almería se procedió a la detención de 6 personas y a la intervención de 800 kilos de hachís que ya habían sido embalados y preparados para ser ocultados en estructuras metálicas, que posteriormente iban a introducir en un doble fondo de un camión tráiler que partiría cargado de frutas a los Países Bálticos.
De forma paralela, fue detenido otro miembro de la organización en la puerta de embarque de un vuelo que partía de Málaga, cuando intentaba huir de España.
La operación ha sido desarrollada por el Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO) de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil con sede en Tenerife, apoyados por el ECO de Málaga y de otras unidades de Almería y Málaga; y ha contado con la colaboración internacional de Europol, Drugs Enforcement Administration (DEA) de Estados Unidos, la Gendarmería marroquí y la Policía de Lituania.
