El historiador Xabier Moure denunció destrozos en la necrópolis del Monte das Medorras, ubicada en el núcleo de A Veiga de Anzuelos, en la parroquia lancaresa de Vilarello. Está conformada por cinco mámoas, de las que tres fueron «arrasadas totalmente» y las otras dos se conservan «moi danadas», aseguró.
Los enterramientos, que se sitúan a 525 metros de altitud, están catalogados «coma mínimo desde 1991, cando se elaborou un inventario xeral».
Las mámoas se encuentran en unos terrenos con pinos y las gavias realizadas para plantar los árboles las «alteraron gravemente». Sobre dos de los monumentos funerarios, señaló, hay gran cantidad de piedras de cuarzo y cuarcita, que se utilizaban para cubrir los túmulos.
Para el investigador, las plantaciones forestales, como de pinos y eucaliptos, están provocando importantes daños en el patrimonio, principalmente en mámoas al trabajar en los terrenos con maquinaria pesada porque «só levantan un metro do chan».
Los desperfectos en la necrópolis del Monte das Medorras serán comunicados tanto a la Xunta de Galicia como al Ayuntamiento de Láncara, señaló Xabier Moure, quien afirmó que las cinco mámoas eran visibles y los vecinos conocían su existencia.
PROTECCIÓN. El historiador explicó que enterramientos como el de Láncara están protegidos por la Lei do Patrimonio Cultural de la Administración autonómica del año 1995, por la cual en todos los bienes patrimoniales catalogados no se puede actuar «de ningunha forma sobre eles» y los ayuntamientos tienen la obligatoriedad de protegerlos.
Aseguró que, en virtud de esta normativa, para realizar cualquier tipo de actuación en las inmediaciones de los mismos, como plantar o talar árboles, se debe solicitar permiso a la Dirección Xeral do Patrimonio Cultural y se tiene que respetar el área de cautela.
Las mámoas del Monte das Medorras también se encuentran catalogadas en el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Láncara y, según se recoge, cuentan con una protección integral. En este plan, además, se encuentran documentados otros enterramientos del ayuntamiento, como A Coroa, Monte Chá de Santa Marta, Montouto, Alto da Fornela, el Monte da Medorra y el conocido como Alto da Meda ou Alto do Pico.
Xabier Moure ya denunció hace unos meses otros desperfectos en bienes en la comarca de Sarria. En aquella ocasión se trataba de un petroglifo en Betote, en el municipio sarriano, el cual sufrió graves destrozos. En esta misma parroquia se ubica el conocido como Bolo de Betote, el cual, denunció entonces, se encuentra abandonado, por lo que reclamó al Ayuntamiento su señalización.
