Socorro Fierro: "Todos los días veo casos de alopecia femenina"

La dermatóloga habla de un problema recurrente que ha tomado actualidad por la polémica protagonizada por Will Smith y Jada Pinkett en los Oscar
Socorro Fierro, dermatóloga. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Socorro Fierro, dermatóloga. JOSÉ Mª ÁLVEZ

La alopecia no es una patología exclusivamente masculina. Cada vez más mujeres, como la actriz Jada Pinkett-Smith, deben hacer frente a la pérdida de cabello, en su caso a causa de una alopecia areata. Es un tema que conoce a fondo la dermatóloga Socorro Fierro González, con consultas en Viveiro y Burela.

Cuando se habla de alopecia se piensa en un problema masculino, pero también lo es femenino. ¿Se sabe el porcentaje de mujeres al que afecta?

Hoy en día supone un tanto por ciento elevado en mi consulta, donde todos los días vemos algún caso. 

¿Cuáles son los distintos tipos de alopecia femenina?

La alopecia femenina, como la masculina, se divide en dos grandes grupos: cicatricial y no cicatricial, en el que estarían incluidos los tipos más frecuentes.

¿La cicatricial es la más grave?

Sí, porque esta destruye el folículo piloso. Los dermatólogos estamos un poco preocupados porque hay un notable aumento de casos de alopecia frontal fibrosante, que es un tipo de liquen plano que destruye el folículo piloso, ocasionando la pérdida del cabello para siempre. Las pacientes ven que la línea de implantación del pelo, la línea donde nace, se va yendo hacia atrás, de manera que aumenta la frente. Esto a veces comienza con una caída de cejas. 

Una caída de cejas puede ser la primera señal de una alopecia frontal fibrosante

¿Saben a qué se debe este incremento de casos?

No se conoce la etiopatogenia exacta. Se piensa que existe una predisposición genética y que además tiene un componente hormonal que justifica que afecte más a la mujer después de la menopausia –también el embarazo y el tratamiento hormonal sustitutivo son considerados como factores de riesgo–. Y existe un componente autoinmune que produce una reacción inflamatoria, destruyéndose el folículo piloso. Son sospechosos también factores ambientales, pero todo esto está en permanente revisión por parte de los grupos de dermatólogos dedicados al estudio del pelo. 

¿Se puede frenar?

Es un poco impredecible, porque a veces va más rápido de lo que pensamos, pero lo que está claro es que si no la tratas no se frena. En una alopecia cicatricial se pierde el folículo, no hay capacidad de recuperación, y por eso es muy importante el diagnóstico precoz para iniciar el tratamiento cuanto antes. Hay múltiples tratamientos dependiendo de la fase en la que se encuentre. 

Comentaba que en la alopecia no cicatricial se incluyen los tipos más frecuentes de esta, ¿de cuáles estamos hablando?

La alopecia androgenética femenina es la causa más frecuente de alopecia en mujeres, afectando al 40% de estas a lo largo de la vida, y en ella influyen fundamentalmente los factores hormonal y genético, igual que en los varones. La alopecia difusa o efluvio es probablemente el motivo de consulta más frecuente de las alopecias, es obligatorio descartar las causas, diferenciarla y ver si coexiste con otra alopecia. También tenemos la alopecia areata, que afecta a aproximadamente el 2% de la población alguna vez en su vida. Se desarrolla con más frecuencia en niños y adultos jóvenes, entre la tercera y cuarta década, aunque se puede manifestar a cualquier edad. Tiene una incidencia familiar de entre el 20%-30%. 

La alopecia androgenética afectará a un 40% de mujeres a lo largo de su vida

¿Cuáles son las características de la alopecia androgenética en mujeres?

En las mujeres la pérdida de cabello se produce en la zona frontoparietal, es decir, desde la coronilla hacia delante. A diferencia de a los hombres, a nosotras no se nos pronuncian las entradas. 

¿Cómo se puede abordar?

Lo primero es hacer un buen diagnóstico, porque a veces es difícil saber si hay asociación con otro tipo de alopecia. Para establecerlo se revisa el estado del cuero cabelludo con el dermatoscopio (tricoscopia), tricograma y biopsia y otros estudios si es preciso, se clasifica y según en qué grado esté se manejará con tratamientos locales o se pasará a medicación oral con antiandrógenos y alguna otra terapia de apoyo, como plasma rico en plaquetas, luces de diodo de baja intensidad, mesoterapia con dutasteride, vitaminas… Pero el tratamiento con antiandrógenos locales y/o orales es fundamental. 

En el caso de la alopecia difusa, ¿cómo la identifica la paciente?

Esta se presenta más en mujeres jóvenes, que lo primero que perciben es una gran caída de cabello con pérdida de volumen por todo el cuero cabelludo y de densidad capilar, sin una localización concreta. Produce mucha angustia porque la paciente piensa que se va a quedar calva, a veces llevan a consulta el cabello que se les ha caído y hacen alusión a lo que disminuyó el grosor de la coleta. 

¿Cuál es su tratamiento?
Depende de su causa, por eso se debe realizar historia clínica y estudios. Si tenemos una disfunción tiroidea, lo primero es tratar el tiroides; si hay un déficit de hierro, hay que buscar de dónde viene esa carencia… El estudio de la alopecia difusa es lo que lleva a su tratamiento, no sirve ir a la farmacia y pedir unas vitaminas.

Lo que ha dejado claro es que el punto de partida es un diagnóstico médico.

Sí, hay que ponerse en manos de un especialista porque tener un diagnóstico acertado es lo más importante. La alopecia es preocupante porque, además de resultar un problema con entidad propia, que afecta de modo importante a la autoestima de esa persona, también puede ser la primera señal de otras enfermedades subyacentes (infecciosas, autoinmunes, déficit nutricional...) y el diagnóstico precoz es fundamental para indicar un tratamiento correcto  y realizar el seguimiento de la evolución. En muchas ocasiones son procesos largos y crónicos y se debe estar al lado del paciente.

Comentarios