«NOS GUSTA mucho ver los pueblos de por allí y vamos a una playa que está cerca de la casa», cuenta Gloria Ramos sobre sus estancias en A Mariña, donde el agua fría la hace recelar de bañarse, pero a cambio se encuentra muy cómoda pescando. «Voy con mi padre y me encanta pescar, aunque sea muy difícil hacerlo con caña y hay que tener cuidado con los cebos, pues usamos gusanos y no me gusta cuando se acercan a mi cara. ¡Qué asco!», cuenta expresiva mientras recuerda que ir de paquete en la moto con su hermano es otra de las cosas buenas de los veranos.
También practicar el baloncesto, del que es una estrella en Campeones y aunque le gusta este y otros deportes -ha hecho fútbol, judo o natación- se queda con los bailes de salón, de los que es toda una experta, lo que le ha permitido lucirse, y de qué manera, en "Bailando con las Estrellas", un programa de TVE. «Grabamos este verano en Barcelona y me llevaron en coche hasta Calella», relata.
Lo que de verdad le gusta a Gloria es el teatro y todos los martes acude a un taller en el barrio madrileño en el que reside. El pasado no pudo ir, pero un compañero la puso al día de que para la semana van a improvisar una serie.
Unas tablas que le sirvieron de mucho a la hora de hacerse con el papel de Collantes para el que había otras candidatas: «Hombre, tan contenta», responde con energía a la pregunta de si se sintió feliz cuando la eligieron. «Estábamos en la sierra y llamaron a mi señora madre y volvimos a Madrid para hacer la entrevista y ya me cogieron», recuerda.
Dice que no le fue difícil aprender el guion: «Me lo dieron, lo leí y ya; además el cine no es como el teatro y si sale mal, repites», aclara, ya experta. En su papel interpreta al último fichaje de un equipo de baloncesto, una chica algo macarra que no para de decir palabrotas. «Yo no soy así en la vida real, pero tenía que hacerlo por el personaje», explica sobre un rodaje que lo único malo que tuvo es que «duró poco, porque fueron dos meses pero pasaron rápido».
Lo mejor, cuenta Gloria, el haber conocido al resto de actores con los que comparte un grupo de whatsapp, que a veces tiene silenciado «porque mandan cosas muy tarde o estoy trabajando» y por el que se enteró de que la película era la elegida para representar a España en los Oscar. De hecho, ya tiene preparado «el vestido coral que llevé a la boda de mi hermana» para lucirlo en la alfombra roja de Los Ángeles si se da la ocasión y tiene claro que no será un impedimento no dominar el inglés, pues para todo tiene recursos, igual que hace en la tienda Adidas donde trabaja, situada en pleno centro de Madrid, en la que «si entra algún extranjero que no entiendo se lo paso a un compañero», ríe.
Gloria, de 25 años, ya tiene pensado el traje que lucirá en los Oscar si 'Campeones' es seleccionada al mejor filme de habla no inglesa
Un trabajo en el que está encantada, aunque le suponga un importante trayecto en Metro y sortear las obras en Gran Vía, donde es raro el día que no la reconozcan por su papel en la peli. «Me preguntan si soy Collantes y los hay que me llaman mosca cojonera», cuenta, aludiendo a la trama del filme. Y Gloria encantada, claro, porque lo suyo es interpretar y le encanta firmar autógrafos y hacerse fotos con quien se lo pida.
SEGUNDA PARTE. Está tan contenta con el éxito de la película que confía en que «pronto haya una segunda parte»; un rodaje al que, de haberlo, le encantaría que estuviera su novio Raúl, que la ha acompañado algunos días a grabar. Gloria, de 25 años, es la pequeña de cuatro hermanos «y la mimada, claro» que como todas las chicas de su edad se maneja a la perfección en las nuevas tecnologías. «Uso Facebook, pero hay que tener mucho cuidado con lo que subes», explica con la lección bien aprendida y esperando que cualquier día le aparezca la ansiada fecha en que se estrene el musical "Los Descendientes", que le apasionan «y me sé toda la música y los bailes».
Mientras tanto, alterna trabajo con ocio y, sobre todo, con no quedarse quieta: «Me gusta cambiar, hacer cosas nuevas», explica la joven, que estudió Administrativo y Educación Infantil. «Hice las prácticas en la guardería Tastas y me acuerdo mucho de Bruno, un niño que siempre me daba la mano y se subía en mis rodillas», asevera con ternura, poco antes de viajar al Festival de San Sebastián, donde el viernes se presentó un documental sobre la vida de los actores de Campeones.
