El delegado del Gobierno para la Violencia de Género, Miguel Lorente, ha considerado hoy que sentencias como la de la Audiencia de Murcia que alude al uso del término "zorra" "justifican" la violencia machista y se enmarcan en un "posmachismo" que reacciona ante el igualitarismo.
Durante una conferencia en el municipio valenciano de Xirivella, Lorente ha advertido de que desde su delegación han empezado "a detectar esa presencia reivindicadora en las actuaciones de profesionales de muchos ámbitos" con la que, en una reacción que ha denominado "posmachismo", tratan de justificar la posición dominante del hombre dentro de una sociedad culturalmente patriarcal que reacciona ante movimientos modernistas, como el igualitarismo.
"Es un momento preocupante no sólo porque se permite escribir esto en una sentencia, sino porque hay mucha gente que, en cualquier ámbito, no es capaz de escribirlo pero sí de pensarlo", ha señalado el delegado gubernamental.
En su opinión, la sentencia del juez Juan del Olmo podía haber tenido la misma resolución "simplemente con escribir que no veía ningún elemento de violencia en la conducta y palabras utilizadas".
Como ejemplo de estas actitudes, Miguel Lorente ha indicado que ha disminuido el número de sentencias condenatorias y ha apuntado que, hace pocos días, "un juez en Granada escribió que la Fiscalía General del Estado había adoptado una posición ideológica que impedía investigar las denuncias falsas", lo que les acercaba, según el juez granadino, "al principio de justicia de los fiscales de Hitler y Stalin".
Ante estas afirmaciones, Lorente ha defendido la necesidad de evitar la exposición de argumentos que puedan justificar una violencia machista que ya de por sí está socialmente justificada "cuando se atribuyen las agresiones a la forma de ser del hombre, a que atraviesa una mala racha en el trabajo o a que se encuentra en el paro".
''ALIMENTACIÓN'' DE ''IDEAS'' Y ''ARGUMENTOS''
Según el delegado para la Violencia de Género, "ahora mismo hay entre quince y veinte hombres en España que están pensando en matar a sus mujeres", a lo que se llega mediante un proceso en el que estos hipotéticos homicidas "se alimentan de ideas y argumentos como los de esta sentencia y, aunque la mayoría no llega a consumar el asesinato, al final del año siempre hay 70 que sí han llegado hasta ese punto".
No obstante, los homicidios de mujeres por violencia machista han descendido desde 2004 en un 6,3 por ciento y el 99,1 por ciento de los españoles rechaza la violencia de género ("uno de los países que más lo hace gracias a la información difundida", ha dicho), pero "todavía hay un 1,4 por ciento de españoles que acepta este tipo de violencia en algunas circunstancias, lo que representa 600.000 personas", según un estudio de esta delegación.
Sin embargo, ese porcentaje se eleva al 6,3 por ciento tras la ruptura de la pareja, y ante la pregunta de si la violencia de género es un problema grave en la sociedad, tan sólo el 1,1 por ciento de los hombres y el 2 por ciento de las mujeres lo considera así, "lo que indica que los hombres están en el problema pero no en la solución".
