Hacerse aliada de las gafas es la mejor opción para no quitarle protagonismo a la mirada. Y, para alcanzar este objetivo, el maquillaje será la herramienta fundamental.
Los cristales tienden a empequeñecer los ojos, sobre todo en quienes padecen miopía. Un buen rizador de pestañas y un delineado alargado conseguirán contrarrestar este efecto, creando la ilusión óptica de tener una mirada más amplia, como el estilo que lleva Gigi Hadid.
Las monturas de las gafas es, además, un referente de la simetría de las cejas. Por tanto, es necesario que estas estén marcadas y con una forma recta, como las lleva Kendall Jenner, para que la parte más expresiva de la cara no se vea traicionada por este efecto visual tan poco deseado.
DRAMATISMO. Beyoncé no se cortó en su videoclip Partition a la hora de jugar con una montura de pasta retro y añadirle un labial rojo intenso. Una combinación a priori arriesgada, pero que acaba siendo un acierto, pues un color llamativo devuelve el protagonismo a los labios, restándoselo a las gafas de pasta. Eso sí, es aconsejable mantener el maquillaje de ojos lo más sencillo posible.
Tampoco es necesario renunciar a un ahumado en las sombras o a oscurecer la mirada, como en el look que luce la modelo Karlie Kloss. Ella optó por una gama de sombras marrones, que se fundían con la montura estampada de sus gafas. En este caso es aconsejable que el resto del rostro luzca sencillo y natural, para no recargar el maquillaje.
