La lluvia que arreció este miércoles en Galicia cesó inesperadamente casi al mismo tiempo que llegaban los Reyes Magos de Oriente, acompañados por su séquito y personajes infantiles como Bob Esponja, que repartieron ilusión y caramelos a su paso por las calles gallegas menos concurridas que otros años.
Las calles de Vigo, muy animadas con una treintena de carrozas dedicadas a los personajes de cuentos infantiles y dibujos animados, acusaron la amenaza de lluvias y, aunque la presencia de público fue multitudinaria, acogieron menos público que otros años. El tiempo acompañó durante el recorrido de los Reyes Magos y finalmente papás y niños utilizaron sus paraguas para hacer acopio de caramelos.
La cabalgata hizo también las delicias de los más pequeños en A Coruña, donde Melchor, Gaspar y Baltasar, ayudados por su séquito y un dispositivo integrado por unas 500 personas, repartieron 3.500 kilos de caramelos.
Los Reyes Magos llegaron sobre las 17:30 horas a la estación del tren y, desde allí, recorrieron las calles coruñesas con 13 carrozas, dos trenes y dos quad-camellos hasta llegar a la plaza de María Pita, donde los recibió el alcalde, Javier Losada, y los más pequeños les hicieron llegar sus cartas y deseos.
En Santiago, una comitiva de siete carrozas, un tren de fantasía con animación musical y Bob Esponja acompañaron a Melchor, Gaspar y Baltasar en la cabalgata, en la que participaron más de 200 figurantes y se repartieron 3.000 kilos de caramelos sin gluten.
Aunque la lluvia no cesó en todo el día, misteriosamente paró poco antes de que llegaran los Reyes a la estación de Ferrocarril, sobre las 18:00 horas, y volvió a arreciar cuando estos alcanzaron la plaza del Obradoiro, donde también les esperaba el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo. El Ayuntamiento estima que unos 2.000 niños han acudido a dejar sus cartas y peticiones a los Reyes en el Pazo de Raxoi tras una cabalgata que cumple su 43 edición y ha contado con un presupuesto de 89.398 euros.
En Ferrol, los Reyes Magos de Oriente cambiaron sus viejos camellos por un barco y llegaron cruzando la ría en una lancha hasta el puerto de Curuxeiras. Las diez carrozas de temática infantil y fantástica con personajes de cuento como Peter Pan o Cenicienta, escoltadas por un gran camión de carbón, repartieron 2.500 kilos de caramelos sin gluten, aptos para niños celíacos.
En Lugo impidió el discurso de Sus Majestades
El adverso temporal de lluvia no deslució la cabalgata de Reyes en Lugo, a donde los Magos llegaron en cuatro carrozas, pero impidió la lectura del discurso que estaba previsto que se pronunciara desde el balcón de la casa consistorial. Personajes especialmente atractivos en el ámbito infantil como Bob Esponja, Dora la Exploradora y Pocoyó formaron parte de esta cabalgata en la que se repartieron 1.000 kilos de caramelos y se entregaron 2.500 bolsas de golosinas.
Miles de lucenses siguieron la cabalgata bajo una débil lluvia que se tornó especialmente intensa en el momento en el que sus Majestades se aproximaban al final del recorrido ante la casa consistorial. Por este motivo, se decidió suspender el discurso y se optó por permitir que los niños accedieran a dialogar con los Reyes ubicados en un trono habilitado en la antesala del salón de plenos.
Ourense recibió también sin lluvia a los Reyes Magos en la estación del tren, desde donde la cabalgata recorrió las principales calles de la ciudad hasta la Plaza Mayor repartiendo caramelos. Hinchables, un roscón de reyes gigante con regalo incluido, el tren chu-chu, zancudos, orquestas y los temas musicales de la popular serie de animación de Bob Esponja completaron las atracciones de la cabalgata de 2011.
