La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic) ha elaborado un decálogo con recomendaciones para que las personas alérgicas, y en especial las que son menores, puedan disfrutar de un verano "seguro".
La Seaic subraya que con el verano son más frecuentes los viajes y los campamentos para niños, así como las comidas fuera de casa, además se está más al aire libre y son más probables las picaduras de insectos. Así, en el caso de los campamentos y excursiones señala que hay que informarse de si el medio de transporte que se use puede suponer algún tipo de riesgo para el pequeño porque se repartan comidas en su interior.
Hay que conocer también si en el alojamiento ofrecen menús especiales para alérgicos y si han establecido medidas de seguridad en el comedor para evitar contaminaciones cruzadas. Es conveniente, asimismo, realizar todas las preguntas necesarias antes de elegir la comida en un restaurante porque a pesar de que existe una normativa que regula la declaración en la carta de la presencia de los 14 alérgenos obligatorios, "es importante comprobarlo preguntando a los trabajadores de hostelería".
Para evitar las picaduras de insectos se recomienda vestir ropa de colores que sean discretos y evitar el uso de colonia
Cuando el menor acude a un campamento, hay que informarse de las medidas de seguridad con el fin de saber si hay personas responsables del cumplimiento de estas medidas y si existen protocolos o experiencia en el manejo de los niños alérgicos y en el uso de autoinyectores de adrenalina. En estos casos, además, la familia debe aportar el informe médico y la medicación para el botiquín de emergencia, así como uno o varios teléfonos de contacto.
Se deben evitar también las picaduras de heminópteros, y a ello contribuye escoger a la hora de vestirse ropa de colores que sean discretos, evitar el uso de colonia o sprays que puedan atraer su atención. Ante estos insectos, si se posan en el cuerpo se debe mantener la calma, permanecer quieto y hacer movimientos lentos hasta que se alejen.
En el caso de picotazo, hay que retirar el aguijón rápidamente -si es una abeja- y con cuidado, y para ello la Seaic aporta un truco como rascar la picadura con una tarjeta, después aplicar frío en la zona y lavar con agua y jabón. Hay que llevar siempre la medicación que se use encima, así como el informe médico a mano y conocer el nombre de los alimentos del país que se va a visitar a los que se es alérgico.
