El presentador de la XXXI gala de los Goya, Dani Rovira, ha asegurado a su llegada este sábado al hotel donde se celebrará la ceremonia a partir de las 22:00 horas que será "una gala divertida", "lo más amena posible" pero que irá "con pies de plomo".
"Vamos a ver al Dani que a mí más me gusta, que es el que más le gusta a la gente: el Dani de la comedia, de la sorpresa, el que va a intentar hacer que la gala sea lo más amena posible", ha explicado a los periodistas en la alfombra roja.
En su tercer año, ha dicho, irá "cuidando las cosas porque en el momento en que mencionas a alguien y sabes que te va a contestar sí o sí... Sigo pensando igual, actuando igual, solo que hay que medir mucho más las cosas, hay que ir con pies de plomo. Miro la RAE siempre", ha indicado sobre la polémica que hubo el año pasado en internet sobre su presentación.
En esta ocasión, ha insistido, lo hará "desde la responsabilidad" que le ha dado "la santa Academia -de Cine- de presentar la gala pero sobre todo divertido, que es un poco el que todo el mundo espera".
Sobre una etiqueta en Twitter que se ha difundido esta mañana llamando al boicot a los Goya, ha ironizado sobre "lo inteligente" que ha sido hacerlo: "si alguien no sabía que era la gala hoy, se ha enterado, así que, por favor, que no dejen de promocionar los Goya".
Entre los cineastas que pasaron por la alfombra roja se encontraban Raúl Arévalo, nominado a Mejor Director Novel, por su cinta Tarde para la ira y Juan Antonio Bayona, a Mejor Director por Un monstruo viene a verme, dos de las cintas más nominadas, han manifestado su ilusión y entusiasmo a su llegada a la alfombra roja de la 31 edición de la Gala de los Goya.
Arévalo ha asegurado que le hace especial ilusión la candidatura a Mejor Guion porque lo escribió con un colega psicólogo David Pulido, y le gustaría verlo subir al escenario. También ha destacado que es "muy bonito" que además, siendo él actor, cinco de sus actores estén nominados y ha descartado que vaya a dejar la interpretación. "No, no. Mi sueño es actuar y poderlo compaginar con la dirección", ha recalcado.
Por su parte, Bayona ha confesado que Un monstruo viene a verme ha sido su película "más difícil y arriesgada" y "una apuesta personal". En este sentido, ha recalcado que ha sido "maravilloso" haber recibido también el "cariño" del público.
