Cuando una tablet es un proyectil

Los médicos del Chus intentaron durante diez horas salvar la vida de la niña de tres años accidentada el lunes en Vilanova, pero presentaba un traumatismo craneal tan severo que acabó falleciendo a pesar de los esfuerzos de todo el personal de la Uvi. El fatídico golpe, en la cara, se lo causó una tablet que iba manejando instantes antes del siniestro. Muchos se extrañaron al leer la noticia, pero en la práctica fue como si le cayesen encima 40 kilos, teniendo en cuenta que el impacto se produjo según las primeras hipótesis a unos 60 por hora.

Es el resultado de la energía cinética, lo que puede hacer que objetos a priori inofensivos como dispositivos electrónicos o bolsos se conviertan, en caso de colisión, en letales proyectiles. Y es que, manual de física en mano, la deceleración por un impacto hace que un enser que viaja suelto en el habitáculo multiplica la mitad de su peso por la velocidad de la marcha al cuadrado. Es decir, que un teléfono móvil pesaría diez kilos o un bolso de cinco pasaría a 280. Eso si el choque se produce a 60 por hora, cuando el peso de cada objeto se multiplica por 56 debido a la inercia que lleva el vehículo. A 120 por hora sería el doble.

No todos son conscientes del peligro, como refleja una encuesta de Race en la que uno de cada cinco conductores españoles reconocieron portar objetos sin amarrar en sus vehículos. Pueden tener la tranquilidad de que ninguna ley de tráfico va a multarlos, porque el código de circulación recoge este apartado en el capítulo obligaciones del conductor –es decir, lo deja al sentido común–, pero el riesgo que corren es superior al de conductas sí sancionables.

SISTEMAS DE SUJECIÓN. De entre los enseres que los conductores acostumbran a llevar sueltos, destaca el smartphone. "Muchas veces lo metemos donde está la palanca de cambios y ni se nos pasa por la cabeza el tener un accidente, claro", percibe la delegada de Stop Accidentes en Galicia, que incide en la importancia de contar con sistemas de sujección: soportes específicos para los dispositivos electrónicos, cintas para las maletas, arandelas para las latas y botellas... "Se trata de cinturones de seguridad para los objetos", observa al experta.

Respecto al funesto accidente de Vilanova, Picard señala que de ir anclada la tablet en el reposacabezas del asiento de delante al de la niña "se hubiese evitado" la tragedia, puesto que la pequeña, según se ha demostrado, sí iba perfectamente amarrada en una sillita infantil reglamentaria. Para evitar que una desgracia así se repita, el presidente de Automovilistas Europeos, Mario Arnaldo, receta "concienciación". "Hacen falta más campañas", reivindica.

"El tema preocupa y debería reflejarse en las estadísticas, porque parece que no está ahí"

Mario Arnaldo, Automovilistas Europeos

Las muertes y lesiones causadas por objetos sueltos en el coche "no suelen reflejarse en los datos de tráfico y por eso a veces parece que no están ahí. Por eso no se puede cuantificar el problema, pero sabemos que es gravísimo". Es la observación de Mario Arnaldo, presidente Automovilistas Asociados Europeos (AEA), quien aboga por dar "mayor visibilidad" a esta circunstancia que no suelen tener en cuenta los conductores ni tampoco los fabricantes.

"Tampoco se refleja en los crash tests, y sería importante que además de dummies se incluyesen objetos como teléfonos móviles en el interior para recrear accidentes reales y medir el comportamiento de estos enseres en el habitáculo". Con todo, cree que las marcas de automóviles han avanzado mucho en los últimos años con las carrocerías deformables, "que absorben precisamente la energía cinética en caso de impacto, como un amortiguador o un acordeón". Cuando eran rígidas, recuerda, se daban muchos casos de accidentados que "no tenían heridas pero por dentro tenían las vísceras destrozadas, al salir despedidas contra los propios huesos".

Además, Arnaldo pone el grito en el cielo con los copilotos que viajan con las piernas encima del salpicadero: "Este verano vi a mucha gente así. En casi de un impacto, aunque sea pequeño, pueden sufrir una lesión medular".

"Algunos coches ya traen en el maletero tiras portaequipajes, hace falta concienciarse"

Jeanne Picard, Stop Accidentes

Jeanne Picard, la representante de la oenegé Stop Accidentes en Galicia, no ve factible empezar a sancionar económicamente a los conductores que lleven enseres sin amarrar a bordo. "Estaríamos multando a todos", observa, aunque recuerda que el asunto aparece como una "obligación" en el códigó de circulación y "se estudia en las autoescuelas". "El problema es que se atribuye al sentido común, y no estamos concienciados", dice.

A diferencia del presidente de Automovilistas Europeos, Picard cree que los fabricantes sí están velando por que no haya objetos sueltos en el habitáculo, si bien cree que todavía queda mucho por hacer. "Algunos coches como los Volvo, que son referencia en seguridad, ya incluyen en el maletero cintas portaequipajes", porque, explica, incluso una maleta alojada en ese espacio podría pasar a la cabina del vehículo si se produce un impacto a gran velocidad.

En este sentido, valora los avances en esta materia y a la hora de decantarse por un modelo se muestra partidaria de aquellos con más huecos en el interior, porque contribuyen a que no vayan enseres sueltos, pero considera que todavía falta "concienciación", para lo que vería con buenos ojos que desde la DGT se llevasen a cabo campañas explicativas sobre este tema.