Aunque se separaron hace más de siete años, Carlos Herrera y Mariló Montero mantienen una excelente relación. Tienen dos hijos en común (Alberto y Rocío) tras casi dos décadas de matrimonio, comparten un negocio y una casa y, desde ahora, ambos son accionistas del Real Betis Balompié, equipo por el que el locutor de la Cope siempre ha sentido pasión.
En total, Herrera y Montero desembolsaron casi un millón de euros para hacerse con un paquete de dos mil acciones. La periodista es navarra de origen pero siempre se ha sentido muy unida a Sevilla, ciudad en la que tiene su sede el Betis.
También se hizo con acciones del equipo andaluz el futbolista Joaquín, a quien algunos ya ven como aspirante en un futuro a la presidencia del club en el que sigue jugando.