La asociación ecologista Adega ha respondido al anuncio del PPdeG de retomar la construcción de una piscifactoría en Cabo Touriñán. Según el colectivo, fue "la afección a paisajes naturales y de especial relevancia" uno de los criterios establecidos en el actual Plan Acuícola para el rechazo de este proyecto.
Según ha indicado este miércoles el presidente del PP coruñés, Carlos Negreira, el plan será modificado con la intención de "facilitar la creación de plantas marinas en nuestro litoral que contribuyan a generar puestos de trabajo y, con ello, riqueza".
En palabras del popular, los cambios serán significativos para la Costa da Morte. En este sentido, ha asegurado que se retomará "ya" el proyecto que Pescanova tenía previsto para Touriñán, y que los proyectos de Merexo, Seiruga y Camelle, con sonada oposición vecinal, serán cancelados.
Adega enumera los 'contras'
Adega no comulga con la idea de Negreira. Los ecologistas han citado la falta de aceptación de los agentes sociales, el impacto negativo sobre una zona turística y las "imposibilidades" de mimetización del impacto visual entre los motivos fijados en la normativa actual contra esta iniciativa. Y ha tildado de "nefasto" el plan sectorial de tecnología alimentaria aprobado por la Administración Fraga.
El proyecto que Negreira ha 'resucitado' pasa por la construcción de la mayor planta de rodaballo del mundo. Las instalaciones, cuya inversión era del montante de 40 millones de euros, generarían un total de 450 puestos de trabajo.
Aunque la empresa, líder del sector, se ha comprometido a levantar una granja marina que causase el mínimo impacto visual y ambiental posible, Adega advierte al líder del PP coruñés de que "peca de ingenuo si piensa que no habrá oposición social" ante la recuperación del proyecto.
