El monte vecinal en mano común de Trascastro (O Incio) sufrió varios incendios en los últimos años y es ahora uno de los principales beneficiados de un proyecto de regeneración forestal puesto en marcha por la Xunta de Galicia con una inversión de 400.600 euros. El programa, que afecta a cerca de 86 hectáreas, también incluye actuaciones en los montes de San Pedro y Ferrería, en este mismo municipio, y Coto Redondo, en el vecino ayuntamiento de Samos.
Todos ellos están bajo la gestión del ente autonómico a través de los respectivos convenios con las comunidades de montes vecinales en mano común propietarias.
Los trabajos ya están en marcha desde el pasado mes de diciembre y fueron visitados este jueves en Trascastro por, entre otros, el delegado territorial de la Xunta en Lugo, Javier Arias; la jefa territorial de la Consellería de Medio Rural, Olga Iglesias; el alcalde de O Incio, Héctor Corujo; el jefe del servicio provincial de montes, Miguel Ángel Cela, y el director gerente de la empresa pública Seaga, Pablo Arbones. Esta última es la firma que ejecuta las actuaciones.
Las labores, que permiten restaurar y proteger la zona ante posibles incendios forestales, benefician a una superficie total de 85,98 hectáreas, la mayor parte de ellas en el monte de Trascastro. En concreto, en 50 hectáreas serán creadas masas forestales con la reforestación de cerca de 30 con pino del país y pino rubio y con ayudas a la regeneración natural en otras 20 con abedul.
El proyecto contempla la ejecución de unas 32 hectáreas de cortafuegos con pasteros y la creación de cuatro hectáreas de fajas de gestión de la biomasa, con lo que se incrementa la protección contra el fuego de las nuevas masas forestales. De esta forma, "hai unha liña de corte en caso de lume", indicó el jefe del servicio provincial de montes, quien detalló las actuaciones a realizar.
Entre ellas está la construcción de un punto de agua para helicópteros en Coto Redondo. En este monte ya existe un depósito para motobombas, el cual será sustituido por uno de mayor tamaño para que también pueda ser utilizadopor las aeronaves.
El programa incluye la mejora de 12 kilómetros de vías y la apertura de un nuevo tramo de pista de 600 metros.
Los trabajos, con un plazo de ejecución de doce meses, comenzaron con desbroces y la preparación de los terrenos en los que se repoblará, estando previsto que las plantaciones se lleven a cabo en primavera, según explicaron.
Las actuaciones, cofinanciadas con el Fondo Europeo Agrario de Desenvolvemento Rural (Feader), pretenden "recuperar o potencial forestal e a corrección dos desequilibrios hidrolóxicos ocasionados na cabeceira dos arroios", tal y como destacó el delegado territorial.
Por su parte, el alcalde de O Incio señaló que las labores permitirán "poñer en valor unha zona do monte" y "promoverán o potencial forestal" del lugar.
La ruta do Ferro, con una longitud de seis kilómetros, fue acondicionada hace cinco años con una ayuda del GDR ribeira Sacra-Courel y es un itinerario homologado por la Federación Galega de Montañismo desde 2018.
