La preocupación se instaló este jueves en el municipio de O Incio al dispararse hasta 67 (en un primer momento se había informado de 69) el número de contagios por coronavirus en la residencia de mayores, lo que llevó a la Xunta a acordar la intervención sanitaria de este centro. Ello implicará que profesionales del Servizo Galego de Saúde harán un seguimiento médico constante de los usuarios y supervisarán la correcta aplicación de todos los protocolos.
El miércoles se conoció el primer positivo de una empleada de la residencia, vinculada con el brote de Monforte de Lemos. Esa tarde se realizaron 190 pruebas PCR al conjunto de usuarios y trabajadores del geriátrico, y el resultado dejó un duro escenario. Los contagios se habían propagado como la pólvora, afectando a 59 internos y 8 profesionales, incluido el primer caso, que pudo haber acudido dos días con síntomas.
De este modo, el brote de Covid- 19 alcanza a la mitad de los 116 residentes de este centro, el cual cuenta también con apartamentos tutelados. Por su parte, la plantilla está formada por 74 personas, muchas de ellas vecinas de O Incio, pero también de otros municipios próximos.
Los ocho trabajadores afectados se encuentran en su domicilio y, entre los mayores que dieron positivo, 55 permanecen en el centro y dos están en el Hula, donde permanecían ingresados con anterioridad y donde se les realizaron las correspondientes pruebas que confirmaron que tenían Covid.
La noticia positiva es que la totalidad de los residentes afectados son asintomáticos, según informó este jueves la Consellería de Sanidade.
Este departamento, en coordinación con el área de Política Social, y tras evaluar la evolución epidemiológica del geriátrico, comunicó a última hora de la tarde de este jueves la decisión de intervenirlo, medida que había pedido también el BNG, con el fin de "garantir a calidade asistencial e a correcta protección da saúde dos residentes e dos traballadores", de modo que reforzará con personal propio estas instalaciones.
Por la mañana, dos médicos y una enfermera ya se desplazaron hasta O Incio para evaluar el centro y activar una serie de medidas para frenar la expansión del virus. También comenzó a trabajar en la zona un equipo con la misión de rastrear los contactos de los nuevos positivos, a los cuales el Concello ofreció su colaboración. No se descarta que estas conexiones lleguen a otros municipios dada la estrecha relación de O Incio con Sarria, su comarca y concellos próximos.
REORGANIZACIÓN. Desde la propia residencia, dependiente de la fundación San Rosendo, activaron también todos los protocolos de coronavirus. A esta entidad le constaban este jueves 57 residentes contagiados (dos en el Hula), dos dudosos a los que se repetirá la prueba, 60 negativos y uno a la espera del test por estar estos días en su domicilio. Según explicaron, el centro fue sometido ayer a una reorganización, de modo que en la práctica quedó desdoblado, con los 55 positivos reubicados en la primera planta y el resto, en la segunda.
Fuentes de la fundación señalaron también que cada planta está siendo atendida por grupos de trabajadores independientes, provistos todos ellos de los correspondientes Epis.
La residencia de mayores regresa a la fase 0, con las visitas suspendidas, al igual que las salidas de los residentes. Tampoco se utilizan las zonas comunes y los usuarios se encuentran en sus habitaciones donde reciben las comidas. La fundación aseguró que los positivos son "asintomáticos" y que se hará una vigilancia "escrupulosa" de cualquier cambio. Dijo, además, que las familias están al corriente de la situación y quiso agradecer sus mensajes de ánimo, al igual que la predisposición de aquellos trabajadores que estaban de vacaciones y "llamaron para reincorporarse".
CRIBADO MASIVO. El Concello de O Incio, en contacto permanente con la Xunta, reiteró su colaboración total. Tras conocer los resultados, el alcalde, Héctor Corujo, pidió a la administración autonómica que practique pruebas PCR a toda la población del municipio, además de recomendar a los vecinos que sigan aplicando todas las normas de prevención. El Ayuntamiento implantó también otras medidas como la suspensión temporal del servicio de ayuda en el hogar (salvo casos vulnerables) y de toda actividad lúdica, cultural y deportiva, así como de ferias y mercados.
También se retomará el servicio de ayuda a domicilio de medicamentos y alimentos a aquellas personas que lo precisen, y se ofrece ayuda los vecinos a través del teléfono 982.42.70.14.
El Concello pide en un bando que, en caso de presentar síntomas compatibles con Covid, se comunique a las autoridades sanitarias de forma inminente.
Hasta la fecha, la residencia de O Incio se había caracterizado por sobrellevar con éxito la pandemia, hecho celebrado en su día por toda la comunidad. En el acceso a las instalaciones se podía ver este jueves uno de los carteles elaborados por los residentes con el mensaje "todo vai saír ben", que compila el deseo general tras una noticia que dejó inquietud entre la población.
