Los vecinos de la parroquia sarriana de San Sadurniño de Ferreiros denuncian la peligrosidad de un puente que, según dicen, lleva más de año y medio con daños en su estructura, por lo que temen que pueda ocurrir un accidente y reclaman su arreglo.
Según explican, el puente en cuestión se encuentran en una carretera provincial y, hace cerca de dos años, sufrió un desplazamiento en uno de los pilares que lo sustentan. Desde entonces permanece apuntalado en su parte inferior y con una valla de señalización en la superior. "En todo este tempo non se tocou e tememos que vaia quedar sen arranxar cando pode pasar algo porque é unha estrada moi frecuentada", señala una vecina, quien añade que "estamos pagando impostos para que as cousas estean en condicións".
Otro de los residentes en la parroquia comenta que la construcción del puente se realizó hace ya muchos años con materiales que no son resistentes por lo que las crecidas y la fuerza del agua fueron haciendo mella hasta que "rompeu un pilar".
"Tememos que vaia quedar sen arranxar e pode pasar algo porque é unha estrada moi frecuentada", aseguran los afectados
Tras ser alertadas de esta situación, las autoridades competentes colocaron unos puntales de hierro, pero "os días convertéronse en anos". Además, las vallas que impiden a los vehículos circular por un lateral del puente "pola noite non se ven" y suelen caer, siendo los vecinos quienes las levantan, afirman. También critican la colocación de una señal para prohibir el paso de vehículos de cierto tonelaje, medida que ven insuficiente porque, además, "un tractor sen carga xa supera ese peso".
CAMIONES. La carretera afectada tiene bastante tráfico al tratarse de la vía que conduce a Ferreiros desde la rotonda del polígono industrial de O Morelle, además de conectar con otras parroquias como Seteventos y Louseiro.
Según señalan los vecinos, también tiene mucho tránsito de camiones de recogida de leche de las explotaciones ganaderas del entorno o que prestan servicio a granjas de pollos, entre otros.
"Antes era unha zona de paseo, pero a xente foi deixando de pasar por aquí porque hai medo e é un perigo", manifiestan.
