El vandalismo y el paso del tiempo hacen mella en el Campo do Río de Sarria

Una parte de la barandilla de madera ha desaparecido y un tramo fue lanzado al cauce, en el que también hay tirados vasos y botellas
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photo_camera Barandilla del Campo do Río tirada en el cauce. PORTO

La barandilla de madera del céntrico Campo do Río de Sarria presenta numerosos desperfectos a causa del vandalismo y el paso del tiempo.

Una buena parte de la valla ha desaparecido. A ello se sumó estos días otro tramo de la baranda, que fue tirada al cauce. Se trata de una "gamberrada, como muchas que se hacen sobre todo los fines de semana", señaló el alcalde, Claudio Garrido. La barandilla permanecía este domingo en el río.

En algunos puntos se colocaron cintas de protección para alertar del peligro, pero en otros no existen, con el consiguiente riesgo si alguien se acerca al cauce. El Campo do Río es un lugar concurrido, ya que en él se ubica un aparcamiento muy utilizado por los vecinos y visitantes.

La barandilla también se encuentra deteriorada por el paso del tiempo y la falta de un mantenimiento periódico. El mal estado de esta ya fue denunciado en varias ocasiones por el grupo municipal del PP.

Además de la baranda dañada, en la zona hay un banco de piedra del que solo se conservan los pies, y fueron lanzados al cauce tanto botellas como vasos, dando una mala imagen. Se trata de un problema que se repite habitualmente en este punto del río.

Saneamiento. El regidor explicó que desde el Ayuntamiento no van a reponer ahora la barandilla de madera, pues el lugar se verá afectado por el proyecto de renovación del saneamiento y la estación depuradora de aguas residuales (Edar) que ejecutará la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS). Por este punto discurrirá la nueva red y habría que sacar la valla en poco tiempo, ya que las actuaciones se encuentran en proceso de licitación.

Por otro lado, en las últimas semanas también dañaron la barandilla del paseo del Malecón, situado a escasos metros del Campo do Río. En este caso rompieron un cristal, situación que ya se dio también en anteriores ocasiones.

Desde el Ayuntamiento, dijo el alcalde, pidieron el mismo día el vidrio para reponerlo, aunque no hay stock y están pendientes de que sea recibido.

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