La creatividad es, en la Panadería Pallares de Sarria, una de las marcas de la casa. El histórico negocio, con más de 140 años de historia, no solo cuenta con su propio museo sino que sus escaparates sorprenden a clientes y público en general por su originalidad y por abordar temas actuales desde la óptica del humor.
La última de las creaciones ideada por el panadero Javier Fernández —con la ayuda de su esposa, Pilar García, y la hija de ambos— se inspira en la situación de Cataluña y representa a los políticos Mariano Rajoy, Albert Rivera, Pedro Sánchez y Carles Puigdemont —con su característico pelo incluido— vestidos de Papá Noel y rodillo en mano. "Tratamos de poñerlle un pouco de humor á actualidade, dende o respecto a todo o mundo", explica Pilar García.
Los escaparates del negocio sarriano se renuevan prácticamente todos los meses, con una temática acorde a la época o a los asuntos más candentes del momento
Pero la política no es ni mucho menos la única temática presente en los escaparates del establecimiento. La Panadería Pallares también se implica con el medio ambiente y, en otra de sus vitrinas, reflexiona sobre la lacra de los incendios forestales con un árbol quemado y el lema "Se soubese que o mundo se acaba mañá, eu hoxe aínda plantaría unha árbore". Y todavía tiene imaginación para crear un tercer escaparate con ambientación navideña.
El mérito de estos panaderos es doble porque, a la idea original, se une el trabajo para plasmarla, con una elaboración totalmente artesanal, en la que utilizan desde panes hasta material reciclado.
Los escaparates del negocio sarriano se renuevan prácticamente todos los meses, con una temática acorde a la época del año o a los asuntos más candentes del momento, entre los que tampoco falta la actualidad local reflejada, por ejemplo, en una composición sobre el cierre de Ponte Ribeira.
"Moitas veces pregúntannos se temos un escaparatista", comentan los responsables de la panadería y artífices de todas estas iniciativas. De su mente salió también el proyecto de fundar en 2012 el Museo do Pan —con utensilios empleados en la panadería desde sus orígenes— y de ampliarlo en 2015 recreando un ultramarinos de mediados del siglo pasado.
Además, el pasado año celebraron a lo grande el 140 aniversario de Pallares, con una fiesta abierta a todos los vecinos, con empanadas y repostería de gran tamaño, música en directo y un "photocall" con el burro Pastor, una réplica del animal utilizado antaño para el reparto y hoy convertido en un símbolo del establecimiento.
