Un siglo del Teatro Salón

En marzo de 1919 se estrenaba con un "selecto" programa de películas la primera sala de cine de Sarria. El Salón, luego llamado Barbagelata, nacía con avanzadas instalaciones y el deseo de ofrecer también tertulias y otros espectáculos

Un grupo de cinéfilos, ante los edificios del Teatro Salón. EP
photo_camera Un grupo de cinéfilos, ante los edificios del Teatro Salón. EP

TANTO EL Casino de Sarria, situado en la Rúa Maior, como la antigua Casa Acevedo, en la calle Marqués de Ugena, acogieron las incipientes proyecciones de películas en Sarria, pero no fue hasta 1919 cuando nació la primera sala de cine como tal en la villa. Era el Cine Salón, también llamado Teatro Salón, cuya primera exhibición tuvo lugar hace ahora un siglo, el 16 de marzo de aquel año.

Las crónicas del momento nada concretan sobre el filme elegido para tal estreno, pero sí dejan constancia de que los sarrianos pudieron ver un programa "muy selecto". Y no era para menos. La sala que se había construido en unos terrenos de la Rúa do Porvir (en la parte que hoy corresponde a Marqués de Ugena) gozaba de avanzados medios para su época.

Sus promotores eran, además, ambiciosos en su proyecto. "La empresa del Cine Salón no limita sus aspiraciones a presentar películas, sino que quiere instalar el salón en condiciones de fomentar las tertulias y presenciar otros espectáculos si el público responde a los esfuerzos de la empresa", recogía el diario El Progreso, tal y como recuerda el investigador Xaime Félix López Arias, Arlindo, del Seminario de Estudos Sarriaos Francisco Vázquez Saco.

Imagen de 1924 del Teatro Salón de Sarria. EP

La creación del Cine Salón se debió al empeño de un grupo de emprendedores de la localidad: Antonio y Eugenio Quiroga, Matías Vázquez, Manuel Gutiérrez y el Marqués de Ugena. Las instalaciones -hoy ocupadas por tres viviendas- comenzaron a gestarse mucho antes del estreno. En mayo de 1918, La Idea Moderna daba cuenta del avance del proyecto, que estaba llamado a colocar a Sarria "a la altura de otras poblaciones de mayor importancia".

Según los datos que maneja López Arias, el corresponsal de aquel medio se hacía eco de la iniciativa de este grupo de "entusiastas hijos de Sarria" para levantar un "pabellón" con la amplitud suficiente y dotado de los elementos necesarios para exhibir películas y ofrecer otros espectáculos.

En noviembre de aquel mismo año, las obras estaban ya finalizadas. Una noticia de El Progreso recogía la última hora de este Cine Salón, cuyos accionistas se proponían "dar buenas series de selectos espectáculos, sin que el fin que persiguen sea de lucro, sino para darle al pueblo un nuevo medio de esparcimiento y local adecuado para la celebración de solemnidades, del que carece Sarria, teniendo pleno derecho a él".

EN DOMINGO. Así, el 16 de marzo de 1919, pese a que todavía no habían finalizado las obras de decorado del Salón, la "simpática y alegre villa de Sarria" asistía ya a las primeras proyecciones gracias a un aparato de la conocida firma francesa Casa Pathé. "Es tan creciente el número de personas que rogaron a la empresa que inaugurase cuanto antes este espectáculo, que decidieron realizar esta inauguración, aprovechando la circunstancia de ser domingo y de contar con programa de películas muy selecto", indicaba la crónica del estreno.

El Cine Salón sería más tarde adquirido por Eduardo Barbagelata, procedente de Monforte, quien le dio su nombre y lo explotó con gran éxito, logrando fama con espectáculos como los de la cantante y actriz mexicana Irma Vila. A finales de los años 40 echó el cierre con la cinta El signo del Zorro.

Función a favor de la compra de un aeroplano
La documentación reunida por Xaime Félix López Arias da testimonio de un gran número de funciones en el Cine Salón y el Barbagelata, consistentes no solo en la proyección de filmes sino también en actos benéficos, conferencias o veladas teatrales.
Así, el 26 de octubre del año 1936 hubo una función a favor de la suscripción para la compra de un aeroplano que llevaría el nombre de Lugo, explica el investigador sarriano.
"O persoal do cine non cobrou, a electricidade facilitouna a empresa distribuidora e o impresor Felipe Rodríguez fixo gratis os impresos publicitarios", señala López Arias.
El 4 de enero de 1924 también se celebró una velada teatral en beneficio de la sociedad cultural y recreativa La Unión y, durante una semana del mes de marzo de 1940, los religiosos mercedarios José María Vallejo y Fernando Vázquez ofrecieron conferencias en estas mismas instalaciones.
La variedad de eventos iba desde una actuación de la compañía de zarzuela de Leonardo Rodríguez hasta una velada de boxeo con Mera (exentrenador de Uzcudun) o un festival a favor de la Cruz Roja de la localidad.
Sarria lleva sin salas de cine 20 años tras cerrar, primero el Capitol (1966-1991) y luego el Cissa (1947-1998).

 

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