Una tromba de agua causó daños en el Camino de Santiago en la entrada de Samos al arrastrar el firme. Los vecinos aseguran que es una situación que se repite, por lo que reclaman que el Xacobeo dote de saneamiento al itinerario para evitar nuevos desperfectos.
Se trata del tramo del Camino que conecta la carretera de Lóuzara con la calle Fontao de Samos pasando por Outeiro. En esta zona el recorrido presenta una fuerte pendiente, por lo que en caso de intensas lluvias el agua se lleva por delante el pavimento.
Los vecinos afirman que el itinerario ya se encontraba en mal estado y que una tormenta ocurrida el pasado domingo "acabó de destrozarlo". "Quedó intransitable", señala una samonense. "Fue una auténtica riada y se llevó todo. Estaba todo lleno de piedras", indica otro vecino del lugar.
La tromba arrastró la tierra y la zahorra del Camino y parte acabó en una vivienda, lamenta su propietaria. Para evitar la entrada de restos y de agua incluso tuvieron que hacer unas barreras con tierra y colocar sacos.
Parte del pavimento del Camino terminó en la calle Fontao, la cual también tiene una importante pendiente y los restos fueron limpiados por el Concello.
Unas vecinas se pusieron en contacto con el Xacobeo para transmitirle la situación de la ruta jacobea y reclamarle una solución para evitar nuevos desperfectos. Una de ellas también alertó al Ayuntamiento y le indicaron que es competencia de la Administración autonómica. Además, afirma que lo puso en conocimiento de la empresa encargada del mantenimiento del Camino, aunque "al ver el desastre comentaron que ellos poco podían hacer, que pasaban información".
Según señala, con anterioridad ya se puso en contacto con las administraciones para que dotaran de saneamiento al itinerario, aunque sin éxito. Los vecinos consideran "penosa" la entrada de la ruta jacobea en Samos, municipio que, recuerdan, "vive del turismo". Denuncian la "mala imagen" que esto supone para los peregrinos. El estado del recorrido ya provocó quejas de los caminantes, indican.
