El secretario y el interventor del Concello de Sarria tomarán la palabra en los plenos para asesorar o aclarar dudas cuando medie un requerimiento por parte del alcalde y no como norma general a petición de cualquier miembro de la corporación. Ambos funcionarios emitieron sendos informes en los que atribuyen a la presidencia del pleno esta competencia.
La polémica tuvo su origen hace unos meses cuando, en el transcurso de una sesión plenaria, el alcalde, Claudio Garrido, denegó la posibilidad de dirigir preguntas a ambos técnicos alegando que para resolver dudas estaban las comisiones. La decisión motivó quejas de todos los grupos de la oposición porque, según dijeron, nunca se había producido una situación similar en este Ayuntamiento.
A raíz de aquellos hechos, el PP presentó una moción para que secretario e interventor comparezcan en todos los plenos y "respondan ás preguntas e interpelacións que lles realicen a totalidade dos concelleiros" relacionadas con los asuntos del orden del día y también con cuestiones que puedan surgir en ruegos y preguntas. La misma moción, aprobada con el respaldo de PSOE y BNG, recogía también que el alcalde "en ningún caso" podría negar ni impedir la realización de tales preguntas.
Según el informe emitido por secretaría, este último punto "pretende dotar os concelleiros duns dereitos que non teñen e privar ao presidente do pleno dunha función que lle atribúe a lei", como es organizar y moderar las sesiones. Ello incluye "ponderar ou canalizar as preguntas ou dúbidas sobre a legalidade que teñen dereito a formular os concelleiros ao secretario da corporación".
En todo caso, señala que el secretario "responderá ás preguntas que lle realicen a totalidade dos concelleiros da corporación municipal cando medie requerimento expreso de quen presida o pleno ou órgano colexiado de que se trate". Tras aclarar que el interventor no está obligado a acudir al pleno, el informe considera que "non ten sentido ningún" que ambos técnicos tomen la palabra en ruegos y preguntas al ser este un apartado dedicado al control del gobierno por parte de la oposición.
El informe del interventor concluye también que su participación en el debate plenario "restrínxese ao asesoramento técnico ou aclaración de conceptos a iniciativa da presidencia". "Non se contempla a posibilidade de interpelación ao órgano interventor como mecanismo de control dos órganos de goberno", añade.
A exposición
Esta normativa se encuentra a exposición pública hasta el próximo día 10 y, en el caso de que no se presenten alegaciones, entraría en vigor en el pleno de este mismo mes.
Un cronómetro
Ello implicaría el empleo de un cronómetro para llevar el control de los tiempos, que serán de seis minutos para la primera intervención de cada uno de los portavoces y de tres minutos para las réplicas. No se descarta usar en un primer momento un método manual a la espera de que el Ayuntamiento compre un sistema más automatizado.
Dos mociones
El mismo reglamento aprobado establece un máximo de dos mociones y dos preguntas para formular por cada grupo político y por sesión.
