El juzgado de Sarria ha decretado la apertura de juicio oral contra un vecino de la localidad por un presunto delito de abuso sexual en grado de tentativa a una menor de 16 años de edad.
Se trata del caso en el cual el supuesto autor fue descubierto por la madre de la adolescente, quien en el momento de los hechos, en junio de 2019, tenía 13 años.
La mujer se hizo cargo del teléfono móvil de su hija para hacer un seguimiento de unos extraños mensajes que había comenzado a enviarle un vecino, respondiendo ella a partir de ese instante. De este modo, pudo ver que el interlocutor derivaba la conversación hacia un contenido sexual hasta que supuestamente envió imágenes explícitas pidiendo a cambio otras de la misma naturaleza a quien creía ser la menor. Todo ello a través de una aplicación con borrado instantáneo, pero cuyo contenido pudo registrar la madre.
En un inicio, los hechos fueron archivados provisionalmente por el juzgado por ser la progenitora quien contestaba a los mensajes pero, tras un recurso de la familia de la menor, el pasado verano se reabrió la investigación. Después de tomar declaración a la madre, que dijo actuar en el afán de proteger a su hija, el juez observó indicios de un posible delito de abuso sexual y ordenó continuar con el procedimiento, que motivará un juicio en Lugo en junio.
El fiscal formuló un escrito en el que pide para el encausado una pena de cinco meses y 29 días de prisión, prohibición de acercarse a menos de 200 metros de la menor y de comunicarse con ella durante tres años, y libertad vigilada por un año. La acusación particular, ejercida por los padres de la niña, solicita la misma pena y pide también responsabilidad civil.
El hombre, por su parte, negó los hechos en sus declaraciones previas, en las que alegó desconocer que se dirigía a una menor.
